-Uchiha san –susurró Gaara.
-No te distraigas –gimió el rubio aun con el polo en la boca-, te necesito.
A Naruto no le importó que el pelinegro se encontrara viendo como extraía una bala de su brazo, había todo un charco de sangre debajo de él y parecía que con cada segundo extra este se iba creciendo.
Con cuidado usó la punta a fuego vivo para incrustar en su piel de una manera limpia, se aguantó un gran gemido de dolor que hacía su paso para aflorar y continuó con su trabajo. Pequeñas gotas carmesíes pintaban el arma blanca, pero aun así Naruto continuó. El pantalón empezó a mancharse de gotas gruesas de sangre y poco a poco profundizaba la herida.
-Agh –gruñó con rabia, ya casi lo alcanzaba.
Gaara intentó girar la mirada en el momento en el cual Naruto se atravesó a si mismo con el cuchillo, pero debía estar ahí en casos de emergencia. Sasuke solo lo observaba con ganas de vomitar, era demasiada sangre para él. Cuando ya creía que se iba a desmayar de dolor, tocó con la punta la pequeña bala, y haciendo palanca empezó a retirarla de su piel.
Aquella cosa metálica hizo eco en el suelo antes de que Naruto soltara el cuchillo rápido y se desmayara en su sitio.
-¿Se murió? –preguntó asustado Sasuke.
Gaara inmediatamente le sacó la liga de su brazo y con algo de fuerza le inyectó lo que le había dado el rubio. Se podía ver en aquel aparato cristalino como poco a poco el líquido disminuía de tamaño, hasta vaciarse por completo dentro del rubio. Entonces de igual forma lo retiró con más fuerza sin importarle que algo de sangre se viniera con ello.
Sasuke no perdió tiempo, esquivando el charco de sangre se dirigió con sentido a la salida de la enfermería para llamar a alguien a que los ayudara, pero Gaara se lo impidió antes de que pueda salir.
-¿Sabes coser? –le preguntó.
Sasuke podía sentir como Gaara temblaba de nervios a pesar de todo, pero en su apariencia parecía tranquilo y seguro. Jamás lo diría, pero envidiaba aquello del pelirrojo. Asintió con la cabeza y de inmediato Gaara empezó a buscar aguja e hilo en el kit del rubio.
-Cose la herida.
Les estiró los insumos al azabache quien lo miraba perplejo. Coser ropa era una cosa, pero coser en la piel una herida era algo mucho peor. Miró a Gaara escéptico, como intentando decirle que no con los ojos.
-Puede morir si no le cerramos la herida.
Sasuke se mordió el labio sin saber qué hacer, Gaara estaba que le pedía cosas realmente complicadas que si fallaba, significaría haber matado a alguien. Le dio una ojeada a la puerta, rogando que alguien intentara entrar en ese momento y viera toda la escena, de seguro Gaara no lo atraparía a tiempo y podría avisar a las autoridades.
Pero nadie iba a entrar por ahí, y si no hacía algo el rubio realmente moriría por pérdida de sangre.
-Ayúdame a limpiar la sangre, no podemos cometer algún error.
Ambos acomodaron al rubio en el asiento mientras que con algunas gasas y algodones sacaban el exceso de sangre, Sasuke le había dejado eso a Gaara mientras que él metía el hilo en la aguja para poder coser bien. Cuando la piel del rubio estuvo sin sangre empezó a atravesar su piel con la aguja.
En el rostro del rubio una mueca de dolor se dibujaba.
Sus manos temblaban, pero no más que su conciencia que cada rato le decía que si no se apuraba este podría morir en sus manos. Torpemente le hizo tres puntos, y con destreza hizo el nudo final. La sangre entonces paró de salir y pudieron darle una última limpieza antes de caer rendidos.
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Buscado por amar
Фанфик(Cancelado. Rehaciendo en nueva cuenta) (Cancelado. Rehaciendo en nueva cuenta) (Cancelado. Rehaciendo en nueva cuenta) Siempre fue tratado como un ser sin corazón. Desde su más reciente vasallo hasta sus altos mandos, todos creían que tarde o tempr...