Unraveled Bond [Pausada]

Capítulo 1

Un suspiro pesado fue soltado por el chico de ojos azul marino mientras ajustaba su cinturón, sentado en una mesa metálica que emitía reflejos blancos molestos. Un traje térmico, liviano y color negro era de su posesión desde hace varios años. El traje estaba integrado por una camisa negra y sobre esta, un chaleco con accesorios. El cinturón estaba unido a una tela que cruzaba diagonalmente por su hombro hasta encontrarse con la parte posterior del cinturón. Contaba con cosas en pequeños bolsillos como bombas explosivas y de humo, un radio y armas blancas que podrían servirle en batalla. Siguiendo con la parte inferior del traje, el pantalón estaba arrugado debajo de las rodillas debido a las botas café ajustadas que usaba.
Colocó su comunicador en el oído y fue caminando por los pasillos grises iluminados con luces blancas. Pasó varias puertas encontrándose con rostros familiares de vez en cuando.
Después de unos minutos llegó a un cuarto iluminado con pantallas hologramas por todos lados. Reconoció a la chica atendiendo los mapas y gráficos mostrados en estas.
—Paula, ¿Algo nuevo?— Se recargó en la mesa donde Paula, una chica pelirroja y energética yacía cumpliendo con sus deberes.
—Lo de siempre Louis, solo pequeños eventos de los que la policía puede encargarse— Sonrió mientras miraba el rostro de su amigo —Ya puedes dejar de hacer esa cara tan seria—
Louis desvió la mirada y miró a dos chicos que entraban al cuarto.
—Joshua, Jake... Llegan tarde—
—¡Solo son 4 minutos!— Joshua señaló su brazo simulando un reloj imaginario.
—Joshua quería comprar un aperitivo antes de venir... La máquina se atoró y tuvimos que empujarla— Jake juntó sus manos y sonrió ligeramente. —No funcionó—
—Nos rendimos y llegamos aquí ¡Boom!—
—Esa expresión era totalmente innecesaria— Louis midió su paciencia y se giró dispuesto a dirigir la palabra a Paula pero un brazo rodeó su hombro y una cabeza se recargó en su hombro.
—¡Louis! Sigues igual de pequeño ¿Cómo estás?— El de ojos marino se apartó para notar mechones de cabello grises y una mirada violeta llena de confianza.
—¿Elias? ¿No deberías estar con...?—
—¡Hey Jason! Cuanto tiempo— Joshua sonrió al notar el abrazo protector por la espalda de un chico con cabellos casi blancos, mirada inexpresiva y una máscara metálica que le cubría hasta la nariz.
—Hm— Expresó el de cabellos albinos.
—Es tan bueno verlos, ¿Cómo les fue en su misión en Nashville?— Preguntó Jake con una ligera sonrisa, su voz hizo girar a Elias, quién se dirigió a él. —Fue fácil, Jason sabe como intimidarlos— Inmediatamente sujetó sus manos fuertemente —Pero parece que hay algo más peligroso...—
—¿Qué...?— Preguntó Jake ciertamente asustado por la mirada seria de Elias.
—Es... ¡Nuevo look de cabello!— Gritó para sentarlo a la fuerza y empezar a juguetear con su cabello.
Jake por el susto, no podía moverse pero Louis apartó a Elias.
—Ya tenemos suficiente con que hayas hecho que nuestro cabello se pareciera, además tenemos asuntos que atender—
—¿Ah?— Cuestionó el de ojos violeta mientras se recargaba en la mesa junto a Paula. —Pero si ella lo dijo, no hay nada interesante que hacer, ¿Por qué no se toman al menos un día para dejar de entrenar y divertirse un rato? Vamos, yo invito las bebidas—
Los ojos de Joshua se iluminaron. —¡Yo apoyo al francés!—
—.
—No—.
—¿!Por qué!?— Cuestionó alargando la última palabra.
Una alarma proveniente de las pantallas les hizo levantar la mirada a todos.
—¿Qué pasa Paula?—.
—Oh Dios...—.