Lágrimas sabor a limón

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Lágrimas de desesperación rodaban por mis mejillas, estaba cansada de esto,fingir y actuar como si nada de esto me estuviera pasando.

Toda mi vida fui reprimida por mis padres, nunca pude tomar mis propias decisiones y ahora esto me provocaba tener un conflicto con todo lo que me rodeaba.

Ellos son unas personas sumamente religiosas y criadas de la manera más antigua que las personas pueden imaginar, y yo estaba feliz con aquella burbuja en la que ellos me tenían (o por lo menos no me perjudicaba ) pero aquello cambió cuando entre a la preparatoria.

Fue ahí cuando me enteré que los que ellos hacían no era normal, no era normal que limitarán mis gustos en ropa, juguetes e incluso cuando era pequeña en amistades.

Recordar hace que mi boca se amargue de nuevo, y no es que no quiera que cambien, nunca he decretado eso ya que se (o es lo que quiero imaginar) que ellos me quier, lo que sucede es que justo ahora me he dado cuenta de algo y se que probablemente tenga que seguir escondiéndolo provocando un sentimiento de frustración que causa estas lágrimas silenciosas.

Unos golpes en mi puerta detienen mis pensamientos
-Alexandra Hija, baja que la cena ya está lista y hoy te toca bendecir los alimentos a ti- suena la voz se mi madre cariñosa como siempre y esta es una de las grandes razones por la que no puedo decirles toda la verdad, ellos son las personas más cariñosas del universo, aunque claro su manera de expresarlo es un poco distinta.

Antes de hablar me aclaró un poco la garganta no quiero que sospeche que he llorado.
-Voy Madre, sólo terminó este trabajo y bajo sin demora- miento como llevo haciendo los últimos meses, no se ha dado cuanta de mi voz y lo sé por que continúa hablando normalmente cuando me contesta.

-Esta bien Hija te esperamos abajo, voy a empezar a servir- Su voz es tan cálida, y amorosa creo que es una de las cosas que más extrañaré... siento como mis ojos se quieren llenar de lágrimas nuevamente, así que detengo mis pensamientos de una vez por todas.

Espero a que se escuchen sus pasos bajando las escaleras para dirigirme al baño y lavarme el rostro, no quiero que se preocupen por mi, aunque se que ellos no me acepten después de lo que haré, yo siempre los voy a amar al fin de cuenta son mis padres.

Salgo de mi habitación, no sin antes apagar las luces y fijarme en la maleta que esta cerca de la ventana, hoy será el día, un suspiro se escapa de mis labios antes de que cierre la puerta tras mi espalda.

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⏰ Última actualización: Jan 17, 2016 ⏰

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