Cosmos.

Introducción.

26 de diciembre de 2031
Cuando se enciende la pantalla estoy sentada en el sillón de mi amplio salón, me levanto de un salto con el corazón a cien y pulso el botón verde. Cuando lo hago, en la amplia pantalla aparece un señor mayor, de unos 60 años. Todo él es seriedad, pero cuando empieza a hablar con un tono alegre me pilla de sorpresa.
-¡Enhorabuena jovencita! Tu solicitud ha sido aceptada, serás de las únicas 10 personas que contactarán con ellos - me lo dice tan rápido que hasta me mareo. Me siento en el sillón, con una sonrisa boba en la cara.
Hace unos meses, por primera vez en la historia, la humanidad contactó con vida extraterrestre inteligente. Esto lo sabremos 50 personas, ya que es un programa bastante restringido. Yo, Luna Evans, estoy entre ellos. Trabajo desde hace poco como bióloga en el centro ASTRO, que nos ha puesto a trabajar allí a grandes promesas. Contamos con jóvenes muy especializados en sus campos, desde el manejo de los idiomas, al campo psicológico, del social al matemático. El centro prometió sacar por sorteo a 10 de nosotros para ser las primeras personas en conocerlos en persona, y aquí estoy, estupefacta por ganar algo en mi vida.
-¿Se encuentra bien señorita Evans?- oigo al director del centro como si estuviese muy lejos.
- Claro, por supuesto... -me pongo en pie, apago la pantalla y voy hacia el baño.
Al entrar veo en el espejo a una chica de 21 años, no muy pálida. Sus facciones son normales, al igual que sus ojos pardos. Lo único raro en ella es su pelo tintado de azul eléctrico, que además empieza a tener raíces marrones. Me hago una cola y me dirijo hacia la entrada de mi casa. ASTRO nos deja vivir en la residencia que hay justo dentro. Al salir me invade el típico olor de oficina, mezclado con perfumes de mujer y olor a productos químicos. Cierro la puerta detrás de mi sintiendo que no la pisaré en bastantes días.
Al salir me encuentro con mi amiga Marte, una de las profesionales en idiomas (sabe hasta 10 a la perfección, da bastante miedo).
-¡Luna, no te lo vas a creer! Me han elegido entre las 10 que hablará con ellos - se acerca a mi y se pone a saltar.
-Marte... ¡estamos juntas! - lo digo mientras me pongo a gritar.
Juntas, caminamos hacia la sala donde conoceremos al resto.