Quiero Estar Siempre Contigo.

Nuestro querido millonario Seto Kaiba se encuentra en una joyería de muy alta calidad, observa todo el lugar hasta encontrarse con lo que ha estado buscando desde hace unos cuantos minutos atrás, sus labios se curvan creando una pequeña sonrisa. Le pide al joyero que le muestra aquel pequeño objeto tan delicado. El joyero se lo muestra y el castaño queda satisfecho con la elección que hizo.

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En la gran mansión, un joven rubio se encuentra esperando a su amado castaño mientras juega con el hermano menor del millonario el cual tiene unos ojos de color violeta y una cabellera de color azabache que cae en sus hombros.
Sus risas llenan el cuarto del menor ya que ahí esta la consola, al parecer es muy divertido jugar Mario Party.

-Es muy divertido jugar contigo Joey- comentó el pequeño azabache mientras presionaba los botones del mando con sus finos dedos. -Cuando estas aquí no me siento tan solo- Agrego a su comentario.

-¿Solo?, no te deberías de sentir solo Moki. Tienes a tu hermano Seto- Con tan solo pensar en el castaño hace que Joey se sonroje.

-Si, pero normalmente a estado ocupado con algo y no me hace caso- Al parecer este pequeño niño es cómplice de su   hermano mayor para llevar acabo su plan. -¿Podrías hablar con el? Ya que van a salir hoy-

-Claro Moki- El rubio le dedico una de sus hermosas sonrisas haciendo que el pequeño se asegurara de que el plan iba a la perfección.

una hora paso y se escucho el ruido de la puerta ser abierta, eso solo significaba una cosa, "Seto llego". El rubio y el azabache pusieron pausa al juego y se levantaron de donde estaba sentados (el suelo) y caminaron escalera abajo para encontrarse con el castaño que hace que Joey se derrita con tan solo ver su mirada ojiazul.

-¡Hermano!- Mokuba fue el primero en saludar a su hermano. -Ya me estabas preocupando, no venias- El pequeño hizo puchero mientras creaba un abrazo cálido.

-Ya esto aquí Mokuba, no tenías porque preocuparte por mi, solo fui a engañar a Joey un rato- Bromeo el castaño haciendo que la mirada de su amado cachorro bajara.-Solo es una broma cachorro, tu sabes que jamas te haría algo tan cruel- Dijo al notar que su cachorro bajo su hermosa mirada.

-Si, lo se. Pero tengo miedo que sea verdad- Carcajeó un poco antes de acercarse al castaño y abrazarlo fuerte.

-Tu tranquilo cachorro, ya veras que en la noche todo cambiara y que los miedos se irán- Correspondió el cálido abrazo del rubio sin romper el que había creado con su hermanito menor.

después de aquella bienvenida, el castaño cito al azabache en su estudio para hablar sobre algunos asuntos pendientes que mantenían esos dos.
Pasaron unos cuantos minutos hasta que el pequeño llego con una gran sonrisa formada en sus labios, al parecer ya se esperaba de que tema hablarían.

-Dime Mokuba, ¿Joey no ha sospechado nada?- Pregunto Seto con una leve sonrisa marcada en su rostro.
-No, por ahora no. Ya le he pedido que hable contigo sobre el supuesto "problema" que tenemos entre hermanos-

-Ya veo Mokuba, muchas gracias por todo lo que estas haciendo por mi, espero saber como recompensarlo- anuncio el castaño haciendo que el azabache se animara.

-¿Me puedes comprar chocolates?- Sabia que su hermano no le permite digerir ese tipo de alimentos, pero puede que sea su oportunidad de comer uno.

-Esta bien- Dijo algo molesto el castaño, en cambio el pequeño estaba que se paraba en el escritorio de su hermano y comenzaba a bailar.

Después de que Mokuba saliera del estudio, un rubio entro al mismo para ver que hacia su sexy castaño de ojos azules.

-Hola cachorro, ¿Pasa algo?- Pregunto al ver que su rubio estaba un poco despistado.