Capítulo once: Universitarios

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- ¿Quién se cree para enviarte flores? ¿Está loco? ¿Le falla la memoria? - protesta Aaron por enésima vez desde que leímos el nombre en la nota. - No te respeta, Bethie, y cree que con unas estúpidas flores te va a ganar. No, eso no pasará.

Mi mirada vuela hacia él cuando noto que ha dejado de caminar como loco por la habitación. Suelto un largo suspiro y asiento, él tiene razón.

- Ya, Aaron, tranquilizate. Esto no cambia nada. - miento, siendo consciente de que en mi interior, el concepto malo que tengo, está transformándose.

Acaricio con mis pulgares la tarjeta del arreglo floral y no puedo evitar el impulso de leer su nombre de nuevo: Cameron.

¿Por qué me envió flores? ¿Por qué?

- Bethie, sólo intento protegerte. - dice, acercándose a mi. - No podemos volver a ver a Cameron o a Jessica.

- Lo sé. - asiento con pesar. - Lamento que estas vacaciones no estén saliendo bien. Pero te agradezco por intentar llevarte bien con Jessica.

- Es buena chica. - mi hermano se encoge de hombros y se levanta como un resorte del suelo. - Bueno, basta ya de lamentarse, vamos a salir hoy día.

Aaron llama a sus amigos de la universidad y, en menos de una hora, ya tienen una plan para el resto del día: iremos a la playa y, en la tarde, veremos películas en su casa. Si bien me siento insegura porque no conozco a esos universitarios, su idea suena mejor que quedarme en el hotel por el resto del día.

- ¡Carpenter! - escucho que grita una voz masculina desde la puerta de la casa. - ¡Ven aquí, amigo, te hemos extrañado!

Mi hermano se acerca al chico de cabello oscuro y mandíbula definida, casi como si hubiese sido hecha con un cincel. Él me dirige una mirada alegre y noto un pendiente colgando de una de sus orejas.

- Tú debes ser Beth. - me dice el amigo de mi hermano. - Yo soy Grayson, es un gusto. - añade, acercándose para darme un abrazo.

- El gusto es todo mío. - respondo, sonriendole. - ¿Nos vamos ya?

- Claro, las cosas ya están en el auto. - con la cabeza asiente hacia una Jeep aparcada en la calle. - Sólo tengo que ir a traer las llaves. Vuelvo enseguida.

- Es un chico entusiasta. - le comento a Aaron cuando Grayson ya ha desaparecido dentro de la casa.

- ¿Quién es entusiasta?

- ¡Hey! - saluda mi hermano y abraza de nuevo a Grayson.

- Ya se saludaron. - digo entre risas. - ¿En qué momento te cambiaste de ropa? - le pregunto, notando que no tiene la misma camiseta negra que cuando nos presentamos.

- La he traído desde la mañana. - responde y Aaron comienza a reír. - Tú debes ser Beth.

- Ya nos presentamos. - le recuerdo, entrecerrando los ojos.

- ¿Nos vamos? - pregunta una voz desde la casa y se materializa en un segundo Grayson.

- Hey, hey, esperen un segundo. - pido, levantando las manos en el aire. - ¿Dos Grayson? ¿Qué sucede aquí? ¿Tenía algo malo el jugo de naranja que tomé esta mañana?

- Yo no soy Grayson. - dice el Grayson de camiseta blanca. - Mi nombre es Ethan. - él extiende la mano y se la estrecho, todavía tratando de procesar todo. - Somos gemelos. - añade, como si leyese mi mente y supiese lo confundida que estoy.

- Nunca había conocido gemelos. - admito, notando que Ethan no tiene el mismo pendiente que su hermano, ni el mismo lunar en la barbilla. - Esto es asombroso.

- Puedes seguir admirando todo lo que quieras en el auto. - bromea Grayson, rodeandome con el brazo mientras caminamos a la Jeep.

Ethan y Grayson resultan ser las personas más divertidas que he conocido en mucho tiempo. No hay ni un solo momento en el que pueda dejar de reír con ellos cerca. Y, a pesar de que me confunden al cambiarse de ropa y fingir que son el otro, me encanta pasar tiempo con ellos.

Aaron está contento con todo y eso me gusta porque cuando estuvimos con Cameron y Jessica, pasaba mucho rato tenso. Es bueno ver a mi hermano sonreír para variar un poco.

- No, Beth, cualquiera menos The Notebook. - pide Grayson. - Prueba con una de acción.

- Bueno, bueno. - accedo, buscando en el catálogo de Netflix alguna otra película. - ¿World War Z?

- ¡Zombies! - exclama Ethan. - ¡Esa!

- ¿Alguien dijo zombies? - pregunta mi hermano, entrando a la sala con palomitas. - Me encantan.

- ¿Bebidas? - Aaron ríe ante mi pregunta.

- No puedo cargar con todo yo solo.

- Bien, iré yo. - accedo, rodando los ojos. - Pero si esa película avanza más de un segundo, están muertos.

Mientras sirvo Coca Cola en el vaso de cada uno, sin pedirlo, a mi mente regresa el recuerdo de las flores.

¿Debería agradecerle? Tal vez podría enviarle un mensaje. Jessica usó mi teléfono para enviarle un mensaje a Cameron cuando nos vimos en el aeropuerto, así que eso no es un problema. La pregunta es: ¿espera él que le agradezca? Porque tal vez solo envío las flores para hacer las paces antes de que no volvamos a vernos más.

Mi cabeza está hecha un nudo.

- ¡Beth, me vuelvo viejo! - grita Grayson. - ¡Necesito saber como matar zombies antes de los 50!

- ¡Ya voy, gruñón! - respondo.

Bien, tal vez esto es una señal para no enviarle el mensaje. Después de todo, él me odia... ¿o me odiaba?

- ¡Dile que deje de cantar! - doy un salto en mi sitio cuando Ethan grita eso. - ¡Van a matarlos a todos! - añade cuando enfocan a los zombies. - ¡Muertos, muertos, muertos!

- Muerto vas a estar tú si no dejas de asustarme de esa forma. - le digo, empujando su brazo.

Mientras los chicos eligen la siguiente película, voy a la cocina por más bebidas para todos. Es entonces cuando recibo un mensaje.

Jacob:

¿Te gustan los picnics?

8:52 PM

Elizabeth:

¿Que si me gustan? ¡Me encantan!

8:53 PM

Jacob:

¿Te gustaría ir conmigo a uno?

8:55 PM

Elizabeth:

Me encantaría. ¿Mañana?

8:56 PM

Jacob:

Mañana estaré en el hotel a la 1PM.

8:57 PM

- ¡Beth, James Bond se hace viejo esperando a que llegues!

- ¡Grayson, voy a golpearte! - le grito de vuelta al gemelo.

- ¡Sin agresiones en esta casa! - interviene su hermano.

Suelto una carcajada y tomo mi vaso para salir de la cocina, pero antes de que pueda poner un pie en el pasillo, me llega un nuevo mensaje. Saco el celular de mi bolsillo trasero con una sonrisa, esperando que Jacob haya enviado algo más.

Me llevo una gran sorpresa cuando veo quién lo ha enviado.






Nuevo capítulo y las cosas parecen estar mejorando para Elizabeth. Segundo día en Los Ángeles y han pasado más cosas que en un episodio de Keeping Up With The Kardashians.

Espero que les esté gustando la novela hasta ahora.

Les mando mil besos!





Hit me with your best shot.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora