Torture (Larry Stylinson)

Capítulo 37

Corrió a desatar a su chico pero cuando estaba cerca, alguien lo alejó. Harry lo miraba expectante, con sus ojos verdosos brillantes y a la vez hinchados de tanto llorar. Esa imagen terminó de destrozar a Louis, perdiendo por un momento su fuerza, Harry era su debilidad y verlo de esa manera, lo lastimaba.

— ¡QUE... ME... SUELTES! —gruñó dando un cabezazo al hombre, quien lo soltó al instante.

Louis agarró el palo nuevamente y tiró golpes a lo adivino en dirección al par, lo curioso es que lograba darles. Se apuntó uno de los golpes, pues impactó la cara de Modest, siendo llevado con toda su fuerza. El tipo cayó. Regresó a Harry y le liberó sus piernas.

— ¡Louis los brazos! —le dijo angustiado. 

— Maldita sea, cierto.

Cuando fue a desatarlo, sintió el agarre nuevamente. Ésta vez no tenía con qué defenderse ya que cuando golpeó a Modest soltó el palo.

— Joder —susurró el rizado haciendo todo tipo de movimientos bruscos para ver si desataba sus brazos. 

Louis forcejeaba mientras Modest se levantaba poco a poco. Harry lo miraba asustado y aceleraba su cuerpo con tal de lograr escapatoria. El mayor mordió el brazo de John y corrió hacia Harry desatando de una vez por todas sus brazos y abrazándolo contra él. Se colocó frente al ojiverde cuando divisó que ambos hombres estaban frente a ellos.

— Se jodieron —manifestó Modest con una expresión de desquiciado. 

Harry temblaba tras Louis. Modest agarró dicho objeto.

— Louis, tengo mie-miedo —susurró. 

Modest se acercaba a darles pero inconscientemente tropezó con una de las largas piernas de Harry. Louis se trepó sobre él mientras Harry se paró para agarrar el garrote pero el gordo se acercaba, el menor señaló a sus espaldas, ingenuamente John volteó a ver, subió a su espalda y colocó el palo en su cuello, tratando de asfixiarlo. El hombre haló fuertemente el cabello del chico, haciendo que gritara y de una vez lo soltara. Louis le dio un "sillazo" John.

— ¡Vete Harry!

— No, Lou. 

— ¡Que te vayas, joder!

— No. 

— ¡HAROLD!

— ¡NOOOO! —Harry corrió hacia Louis, le quitó la silla y se la aventó a Modest en la cabeza, agarró a Louis por la mano y salieron corriendo hacia la guagua.

— La llave, la llave, joder, maldita sea, por la puta, la llave —dijo Louis impaciente, sus manos temblorosas. Harry sacó unas de su bolsillo y abrió.

— Huh? —preguntó confuso, no entendía como la había conseguido. 

Liam estaba perdido. Zayn lo guiaba, pero tampoco le hacía mucho caso.

— Liam, no seas terco y muévete por donde te indico, sé lo que te digo. 

— ¡ACELERA, HOMBRE! —le regañó el morocho — Incluso mi abuela maneja más rápido que tú.

Iban por la maleza a las millas, de repente notaron una guagua que venía de frente igual y/o a mayor velocidad que ellos. Liam frenó de cantazo. — ¿LOUIS? ¡ES LOUIS! 

— Con Harry — terminó Zayn. 

Louis le hizo señas agitadamente de que saliera.

— ¿Cómo haré eso?

— Dando reversa, tonto.

Louis le tocó bocina para que avanzaran, mientras tanto Liam y Zayn debatían. — No soy bueno en eso Zayn, maldita sea todo.

— Salte para el carajo —demandó el moreno. Intercambiaban de asientos. 

— ¡¿QUÉ DIABLOS HACEN?! —gritó Louis al ver dicha maniobra. 

Zayn tomó el volante y comenzó a salir en reversa de una manera experta.

— ¡VAMOS A CHOCAAAAAR!

Liam marcaba el número de Louis, sentía la bilis en la boca, quien contestó fue Harry. — ¿Qué está pasando? 

— ¡Para mi casa, mi casa! —el nerviosismo resaltaba en aquella voz y enganchó. 

Llegaron a la casa del chico. Rápidamente, Harry marcó el código de acceso y entraron ambos autos. Louis se estacionó, volteó a ver a su chico y le dio un fuerte abrazo reconfortante. El rizado lloraba desconsoladamente en su hombro. Louis lo separó para besar su oreja, su mejilla y revolvió su pelo hacia atrás para que no tapara su rostro.

— Si no hubieses llegado... yo-yo no hice nada amor, te lo juro, yo-yo... 

— Shh bebé, tranquilo. Vamos a bajarnos, ¿si?

Harry asintió, sus ojitos tristes y apagados. Louis se bajó apresurado, abrió la puerta y lo ayudó apear. Lo abrazó nuevamente, Liam fue hacia ellos y se unió al abrazo.

— ¿Qué pasó? —preguntó el castaño sumido en el abrazo. 

— Ya sabes —se limito a responder el ojiazul.

Zayn los observaba de lejos. Liam sabía todo, pues su mejor amigo recurrió a su persona en necesidad de un consejo, pero de ahí en adelante se comprometió en ayudarlo en lo que fuese necesario. — Zayn me ayudó a encontrarlos. Aunque igual no valió de mucho porque gracias a Dios salieron bien, pero pues él me levantó del golpe y me avisó.

Louis le dedicó una breve sonrisa a Zayn. Liam se separó de ellos y fue donde el moreno. Harry continuaba llorando. Louis besaba sus hinchados labios, su rostro de un tono rojizo de tanto hipar, en ese momento no había manera de tranquilizarlo.

— Bebé, ya, ya estamos en casa, estamos bien. Te amo, te amo tanto hermoso.

— Yo más Louis, yo mucho más. 

Zayn sentía llorar ante conmovedora escena, su subconsciente haciendo de su presente un recordatorio amistoso de su culpabilidad.

— Vamos a tu cuarto.

— Mis padres deben estar —señaló el auto de sus progenitores. 

— No importa Hazz.

Entre Liam y Louis cargaban a Harry. Zayn se pensaba quedar afuera. — Hey, entra —le habló Louis brindando una mirada agradable. 

Llevaron a Harry hasta su habitación. No se veía nadie.

El teléfono de Zayn comenzó a sonar. — Es Modest —anunció fríamente. 

— Contesta, no quiero que te pase algo a ti también —dijo Liam adivinando su pensamiento. 

Louis recostó a Harry, Liam se paró intencionalmente al lado de Zayn.

— ¿Dónde estás? —se escuchó al otro lado de la línea. 

— Salí a dar una vuelta con, con un primo. Me buscó de sorpresa a la universidad.

— ¿Estás en tu casa?

— Eh, si, en esas.

— Nos vemos allá.

Zayn colgó la llamada. — Chicos, me tengo que ir.

Todos asintieron en compresión. Zayn vivía cerca, podía llegar a pie con facilidad pero Liam se ofreció a llevarlo. Se despidieron.

— Espero que esa actitud de Zayn con nosotros sea honesta —comento Louis acomodando los rizos de su chico. — ¿Cómo conseguiste la llave oficial? Modest la tenía.

— No, cuando me tiré sobre John la saqué de su bolsillo sin que se diera cuenta.

Louis alzó sus cejas sorprendido y le sonrió, se acercó lentamente.

— Eres... todo... un... genio —lo besaba entre palabras. Harry gimió en sus labios, Louis lo besaba muy suave y eso le gustaba mucho, le gustaba sentirse amado.