CAPITULO 5: Búsqueda de prófugos

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"SD", Sebastian Doll, mi hermano. Supuse que el había escrito aquella carta.

La tome y la guarde en mi mochila. Busque mas cosas que podrían servirme, alguna otra pista, pero no encontré nada. Parecía que se habían llevado todo para marcharse. Quería llorar y quedarme allí esperando a que regresaran, pero quería que las cosas cambiaran y no lo harian si me quedaba ahí lamentándome. Nuestra vida nunca fue perfecta y ahora todo lo que habíamos construido para que lo pareciera se había derrumbado.

"¿Por qué hacerle caso a mi hermano?" pensé cuando estaba ya saliendo de mi casa, "El me traiciono." Pero por alguna razón debía hacer lo que me pidió, al fin y al cabo era mi hermano y fue el único que se preocupo por mi. Pero no le iba a ser caso en todo, debía buscarlos.

Sali de la casa esperando encontrarme a Jess, pero no estaba por ninguna parte.- Jess, Jess, soy yo Melanie.-escuche rudios detrás del árbol, me agache y espere a que la persona que estaba allí se fuera. Revise mi teléfono para ver si tenia algún mensaje, pero no. Me arme de valor y camine hacia el árbol.-¡AH!- grite. Jess estaba del otro lado.-¿Por qué no me contestaste estúpido?

-Es que no sabia si eras tu, toda la gente me esta buscando porque les menti, tenemos que irnos ya.- Tomamos las mochilas y salimos corriendo.-¿Encontraste algo?

-No-menti- no dejaron nada.- Aun no confiaba plenamente en el, pero sabia que para que tuviéramos confianza necesitamos decirnos la verdad, pero no podía al menos hasta cuando me demostrara que era totalmente mi amigo.- Jess creo que seria mejor que te fueras a tu casa, esto no te involucra.

-Somos amigos Melanie, no puedo dejarte sola en este momento. Además aquí si me encuentran me mataran.- dijo riéndose.

-Tienes razón, ¿llevas comida?

-Si, tengo todo lo necesario, pero... ¿A dónde iremos?

-Supongo que a los bosques alejados de aquí.- se quedo pensando unos segundos, supuse que no le gustaba la idea.-¿Tienes otro lugar?

-En los bosques estamos en peligro, pero si vamos por la ciudad estaremos expuestos, ¿y si vamos por los pueblos con poca gente? Allí estaríamos un poco mas seguros.

-Es cierto, pero primero tenemos que cambiarnos, tengo que sacarme todo este maquillaje.-Los dos volvimos a entrar a la casa.

Jess estaba en el cuarto de mi hermano buscando ropa que le sirviera, mientras que yo estaba en mi cuarto quitándome todo lo extravagante de mi rostro mirándome en mi espejo de pie.

Mis ojos marrones estaban opacos por las fuertes sombras que llevaban, el delineador, y otros multiples colores que me hacían parecer una barbie. Lo primero que hice fue quitármelos, cosa que hacia solo por las noches, y nunca me quedaba viéndome tanto tiempo en el espejo, y nunca salía a la calle sin maquillaje. Mis labios tenían un color oscuro cosa que también retire. Y luego retire toda la base. Saque de mi cabello las extensiones rubias y quedo solo mi color castaño natural. Me quede mirándome por varios minutos, parecía otra persona, alguien normal.

El siguiente paso fue ponerme ropa diferente. Me saque toda la ropa que llevaba y tome una larga remera gris que tenia en la mochila, también me puso unos anchos pantalones negros, el buzo que me había dado Jess, y unas zapatillas blancas.

En ese momento escuche ruidos de afuera. La policía había llegado.- ¡Jess!- grite tomando mi mochila y saliendo de allí.

-¿Qué?- pregunto saliendo del cuarto en cuero y con una remera en su mano.

-¡Llego la policía, tenemos que irnos ya!

-Bueno espera que me termino de...

-¡No, ahora!- lo agarre de los hombros y lo obligue a ponerse la remera. Cuando termino, salimos cuidadosamente de la habitación.-Salgamos por la puerta de atrás y escondámonos.- Pero en ese momento escuchamos como hombres entraban a la casa.-¿Y ahora?

-Saltemos.-Miramos hacia la ventana y fuimos hasta ella.-¿Quién va primero?

-No se, primero tu.- Se sento en la ventana y me miro.

-Te espero abajo.- y se lanzo. Escuche fuertes pisadas cerca de la habitación y en el mismo momento que entraron al cuarto me tire. Corri sin mirar hacia atrás, hasta donde se encontraba Jess y sin decirnos si quiera una palabra corrimos lejos. Y nunca mire hacia atrás. 

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