Acabo de llegar, no entiendo a la gente cuando habla, ni siquiera me gusta como hablan. La mudanza me ha dejado destrozada, casi no siento las piernas. Ya es tarde. Me voy a la cocina, cojo un vaso de leche con miel y me pongo a mirar por la ventana. Las vistas son muy bonitas, veo una iglesia, un parque con niños todavía jugando a fútbol, parejas que pasan de la mano y muchos gatos por la calle. No se exactamente dónde estoy y que hago aquí, pero está claro que todo pasa por algo.
..........
Me veo sumergida en un montón de ropa, buscando el único pantalón que tengo. La verdad es que nunca me compro pantalones porque no me veo bien con nada. Ir de compras conmigo es literalmente un infierno. Absolutamente todo me queda espantoso. La gente me dice que estoy bien, pero no me ven como me veo yo.
...........
Lo que empezó como algo bonito... recién independizada, buenas vistas y ser autosuficiente. Empieza a ser agobiante, triste, monótono y ya no es suficiente. Estoy en una prisión. Necesito más. Me voy.
No me he equivocado. Vistas al infinito, sol, tranquilidad y ya no me siento sola.
ESTÁS LEYENDO
En Manos Del Destino
RomansaCuantas veces has conocido a alguien y has pensado que era tu alma gemela? Alguna vez te has "enamorado" de alguien sin siquiera conocerle? Yo si!! *_*