Lost Love In The Time [LS]

Capítulo 1

-¡Harry, amor, baja a comer! -grita su madre para que su hijo la escuchara desde abajo.

-Ya voy mamá.- contestó el rizado bajando las escaleras.

-Te preparé ensalada rusa, tu favorita.

El chico asiente con la cabeza, se sienta en la silla tomando el tenedor y llevándose un bocado a la boca.

Harry era un chico de bien, no hablaba mucho. Su único amigo era Liam. Él era un muchacho adorable, ojos cafés, cabello castaño oscuro, un joven apuesto. Harry, durante toda su primaria, sufrió de bullying porque padecía de una enfermedad la cuál su piel se tornaba muy blanca y clara. Lo insultaban, y lo peor de todo era que sufría daño físico. Siempre le decían que porqué estaba aquí en el mundo si debería estar muerto, ya que los cuerpos cuando fallecen se tornan blancos como papel. Por eso era "suicida", nadie sabía eso, ni su madre, solo él.

Era comienzos de clases, los peores días para Harry, ya que entraban nuevos estudiantes y él tenía esa idea en la mente de que se burlarían de él. Era solitario y antisocial, no se hablaba con nadie, sólo con Liam. Si el rizado sufría una escena de bullying, Liam estaba ahí, pero no hacía nada al respecto, se quedaba observando la situación.

De repente, suena el celular de Harry sobre la mesa.

-¿Hola? -dice tragando un bocado.

-Hola Hazz, soy Liam.

-Ah, hola Liam, ¿Cómo has estado?

-Bien, n-necesito decirte algo..

-Dime. -dijo el ojiverde con un tono preocupante.

El chico tardó en responder.

-M-me cambiaré de institución. -traga saliva con dificultad.

Se formó un silencio insoportable.

-¿Q-Qué? -se levantó de la silla. - ¿¡A caso estás loco!? -gritó desesperado.
¿¡Quién será mi amigo, quién me hablará en hora libre, quién me acompañará a la cafetería, quién me ayudará Liam!?. -Gritaba detrás del teléfono escúpiendo sobras de ensalada.

Liam quedó sin habla por largos segundos.

-¡Respóndeme Liam!

-Lo siento hermano, debo hacerlo.

-Pero..

*se corta la llamada*

Estaba claro, Liam no era un amigo de verdad, era solo un "amigo más" o ni eso. Le había avisado por celular la noticia, ni siquiera se había molestado en ir a casa de su amigo para charlar con él, porque sabía por lo que Harry estaba pasando. Harry estaba triste al saber que se quedaría solo, afrontar todo solo. Y si nadie estaba con él, era una presa fácil.
Él no era de esos chicos que no les importaba nada de lo que decían, él era especial. Si alguien le decía que sus anteojos no les quedaba bien, empezaría a usar lentes de contacto y votaría los de cristal, aunque sólo los usa en ocasiones importantes. Le afectaba todo. Necesitaba a alguien que lo abrazaría y le dijera "Estoy contigo, todo estará bien, lo prometo", pero igual sabía que eso no iba a suceder.

-¿Qué pasa amor? -preguntó su madre preocupada viniendo del living.

-Liam se irá de la escuela mamá, nadie estará conmigo, ¡Soy un maldito antisocial de mierda! -comienza a sollozar.

-Oh no, no cariño, no llores, conseguirás más amigos, te lo aseguro. -dijo su madre acariciando su cuero cabelludo.
Harry subió a su habitación dejando la comida mientras maldecía a Liam, y se puso a preparar su bolso para comienzo de clases.