Capítulo 26

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Intentaba abrir los ojos pero los párpados me pesaban demasiado, solo escuchaba unas voces, intente oír mejor y pude distingir la voz de mi madre y la de un hombre mayor.

-Ma..ma-logre decir

-Cariño- vino hacia mi

-Porfavor apartese-dijo el doctor- puede abrir los ojos señorita?

Comenze abrir los ojos, pero los cerré de golpe cuando una luz me cegó, los volví abrir y me encontré con la sonrisa del doctor, supongo que eso era buena señal.

-Su hija esta bien, tendrán que venir para quitarle los puntos y listo, buenas tardes- dijo saliendo por la puerta.

Me toque la cabeza y efectivamente si que los tenia aunque no eran demasiados, maldito Dylan me había vuelto agredir, menos mal que solo queda una semana para el juicio.

-Estas bien?-Pregunto mi madre

-Si aunque me duele un poco la cabeza...

Entraron los chicos, el primero en acercarse fue mi hermano que comenzó a darme besos y abrazos, se que estaba asustado lo podía notar.

-Cómo estás hermanita?

-Estoy bien- le sonreí para que se calmase, volvió a darme otro abrazo.

Mi padre volvió a preguntar como estaba y me acarició el pelo para luego depositarme un beso en la frente.
Alex se acercó con una sonrisa, automáticamente sonreí.

-Me alegro que estés bien pequeña- me dio un beso en la mejilla- nos has dado un buen susto - dijo acariciando me la mejilla

-Bueno - dijo mi hermano cojiendo de los hombros a Alex- la dejamos sola para que se vista y podamos irnos a descansar- lo saco de la habitación

Estaba cansada ya de la protección de mi hermano con su amigo, después hablare con Alex para contarle lo nuestro.

Una vez lista las enfermeras me dieron unos calmantes para el dolor y ya me puede ir a casa.
Estaba estirada en la cama esperando que me subieran la cena, estaba bastante aburrida, me levante y puse una película en el ordenador.

Tocaron a la puerta y entro mi madre con una bandeja hize sitio en el escritorio, me preparo una sopa que estaba deliciosa. No me habían dicho nada de Dylan quería saber que paso con él al final.

-Oye mama sabes que paso con Dylan?- deje de comer para mirarla

-Tu hermano no pudo atraparlo, lo siento cariño- cogió la bandeja- descansa- me dio un beso y se marchó.

Me tome el calmante y me fui a dormir estaba demasiado cansada para seguir despierta.

Me desperté con un rico olor a chocolate, abrí los ojos y me encontré con un bellisimo Alex sonriendo, me había traído el desayuno.

-Buenos dias preciosa- me dio un beso en la mejilla- todo esto es para ti- se sentó a mi lado.

-Me quieres engordar no?-dije de broma

-Bueno si no lo quieres me lo llevo- dijo levantándose

-Ya no te he dicho que no lo quiera- lo abraze por detrás- gracias feo- le di un beso.

-De nada preciosa, espero que te guste- me levante a ver que desayuno me había traído.

En la bandeja se encontraba un vaso de chocolate caliente con unos churros y una cajita roja.

-Y esto?- dije cojiendola

-Es para ti- me sonrió

La abrí y me encontré con un colgante con la letra A lleva unos pequeños diamantes, era precioso.
Fui hablar pero me interrumpió.

-Antes que digas nada, quiero decirte- estaba nervioso y me estaba pasando ese nerviosismo-quee...

-Que- le interrumpi

-Que si quieres ser mi novia?- dijo mirándome a los ojos

Me quedé mirándole a los ojos, me había pedido ser su novia, por fin se atrevió.

-Vas a decir algo?- dijo arrascandose la nuca

Me lancé a sus brazos y le besé, estaba feliz, ahora si que no iba a esconder que estábamos juntos quería que se enterase todo el mundo.

-Eso supongo que es un si- volvió a besarme

-Si, quiero decírselo a mi hermano de una vez, estoy cansada de esconderselo- él asintió.

Y entonces llegó élDonde viven las historias. Descúbrelo ahora