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Acababa de sonar el timbre que anunciaba el fin de la tercera clase y el principio del recreo. Suga subía las escaleras del tercer piso camino a la terraza del instituto, como siempre, no le apetecía ir a la cafetería para ver a sus amigos haciendo idioteces. Los quería mucho, al fin y al cabo eran sus amigos, pero los pobres eran muy idiotas y él era mas bien un chico que disfruta con su propia compañía.

Cruzó la puerta de la terraza y se apoyó en la pared, miró al infinito mientras estiraba sus brazos hacia arriba liberando la tensión de las clases, al desperezarse Suga rozó con la yema de sus dedos algo que se situaba justo encima de él, se giró y alzó su vista descubriendo que no estaba solo en la terraza, sonrió, pues aquella era la última persona que esperaba encontrarse durmiendo en en aquel lugar.

Subió por la escalera hasta colocarse encina del pequeño techo y allí estaba ella. Paula se hallaba completamente dormida en la terraza. Suga conocía muy bien a Paula, y tanto que la conocía, era la hermana de su mejor amigo de la infancia: Jin.

Aunque para ser sinceros los recuerdos más cercanos que tenía de ella no era lo que se puede considerar "inocentes". Se tumbó a su lado pero sin llegar a rozarla lo más mínimo, apartó su cabello colocándolo detrás de su oreja, se acercó a ella y ahora si rozó con sus labios el lóbulo de su oreja.

-¿Qué hace la alumna más preciada del instituto durmiendo en la terraza en horas de clase?- le susurró al oído con la justa intensidad para despertarla pero para sorpresa de Suga ella ya estaba despierta. Paula abrió los ojos y giró su cuerpo quedando boca arriba a pocos centímetros de los labios de Suga.

-Evitando a idiotas como tú, pero veo que no me funciona muy bien- Dicho esto se levantó dispuesta a marcharse de ese lugar pero Suga la agarró de su brazo y la empujó contra él dejándola en la misma postura que estaba antes, sus rostros estaban a menos de 2 cm podían notar el aliento del uno en el otro, Suga empezó a rozar su pierna izquierda desde sus rodillas subiendo peligrosamente por debajo de su falda.

-Creo que podríamos recordar viejos tiempos- Dijo el rozando la puntilla negra de las bragas de Paula, esta se acercó a su oído, pareciendo estar tranquila, como si no tuviera la mano de Suga rozando la más delicada de sus zonas.

-En tus sueños Min Yoongi.-concluyó con un suave susurro antes de librarse del agarre de Suga y desaparecer por la puerta de la terraza.

Suga no se sentía decepcionado, sabía perfectamente que no iba a pasar nada que ella no quisiera que pasara. Ella era así, era donde quisiera y cuando quisiera, le daba igual que el pobre Suga se subiera por las paredes, se muriera de ganas de arrancarle el uniforme y hacer suyo hasta el último centímetro de su cuerpo, si Paula no quería se tenía que joder, aliviarse como pudiera y hacerselo pagar la próxima vez que a la señorita le apeteciera.

Así había sido durante mucho tiempo pero hubo un día que dejó de llamarlo, de mandarle miradas y mensaje con horas y lugares exactos. Jugaba con él y lo peor es que se lo permitía. Suga se había impregnado de su olor, de su pelo, de sus ojos, de su sonrisa, de su cuerpo y de sus andares alegres. Ella era como una droga a la que se había enganchado... Pero parece que ella no sentía lo mismo por él, no la culpaba en ninguno de sus encuentros le había hecho tener ilusiones, ni siquiera se le había escapado un mísero "te quiero", es más nunca lo llamaba por su nombre , Yoongi, siempre Suga. Pero él en su interior escondía todo lo que ella nunca veía de él y por el panorama que se presentaba seguiría siendo así.

Paula atravesaba la puerta de la cafetería, haciendo levantar la mirada de algunos alumnos varones, mientras con la mirada buscaba a sus amigas, a lo lejos visualizó a su hermano Jin con todos sus amigos de siempre. Rapmon repasaba unos apuntes de la clase anterior, J-hope jugaba con V y Jimin a encestar bolitas de papel en un vaso mientras Jin los observaba riendo las ocurrencias de sus amigos pero sin participar en ellas, al fin y al cabo era el mayor y tenía que guardar unas apariencias. Dos mesas más atrás divisó a sus dos amigas a quienes saludó con la mano cuando se percataron de su presencia.

Sweet [Suga.BTS]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora