Enseguida se hizo la hora de comer, yo no tenía muchas ganas de comer porque acababa de desayunar, así que nada más que me serví un poco de arroz. Cuando me senté en la mesa, me di cuenta de que Justin no estaba, Me senté en mi sitio de siempre junto a Jazzy, Jaxon se sentaba a su lado y en frente James junto a Amy.
-Justin se fue por la mañana y todavía no ha vuelto... -dijo Amy.
-No te preocupes... tiene 19 años, sabe cuidarse solo... -le reprochó James.
Yo estaba seria durante toda la comida, todavía estaba mal por lo de la noche anterior, y me había cansado de fingir sonrisas. Terminé de comer, pedí permiso para retirarme de la enorme mesa y me levanté para irme.
-Michelle... ¿Ocurre algo? Te veo un poco apagada... -me dijo Amy con algo de ¿preocupación?
-Estoy bien -mentí. Cuando salí de la cocina oí la puerta de la entrada cerrarse.
-¿Tu otra vez? Con lo bien que estaba y ya se me estropeó el día. -me dijo Justin con burla. A mi no me apetecía discutir, y además siempre que intentaba defenderme él acababa humillándome, así que me quede seria y me dirigí a mi habitación, ignorándolo.
Me metí en mi habitación y cogí mi portátil, me senté en la cama y me puse a mirar fotos que tenía de hace tiempo y entonces la vi, una carpeta con fotos de mi madre y mías, la abrí con curiosidad y vi todas nuestras fotos... en el parque de agua, en el monte, en la playa, hasta en el coche aparcado. Me encantaba sacarme fotos con la cámara interna del móvil y hacer caras graciosas con mi madre... habían tantas, sacando la lengua, dándole un beso en la mejilla, cara de pato, riéndonos, hasta hablando. Sin darme cuenta lloraba, la echaba tanto de menos... Entonces un ruido en mi puerta interrumpió mis pensamientos.
-Cariño... James y yo vamos a salir, nos llevamos a los niños, si quieres venir... -me dijo Amy desde el otro lado de la puerta.
-No me apetece, gracias. -le conteste.
-Vale, vamos a ir de compras, hacer unos recados y una cosa que dijo James así que vamos a llegar tarde -me explicó.
-Vale...
Pude oír como se alejaba. Me quedé un rato más viendo fotos, estuve con el portátil bastante tiempo, hasta que me di cuenta de que tenía hambre, miré el reloj de la mesita y marcaban las 21:00. Hoy no iba a salir así que me vestí para estar más cómoda. Me puse un pantalón muy cortito y una camiseta larga de chico que me llegaba un poco por encima de medio muslo y no dejaba ver el pantaloncito que llevaba. Decidí bajar a tomar algo a la cocina.
Cuando entré pude ver a Justin. ''Mierda'' -pensé. Quería irme pero se notaría demasiado que me voy por su presencia, así que hice como si nada y abrí la nevera para coger un yogur.
-Lárgate de aquí. -me dijo sin ni siquiera mirarme.
-Yo también vivo aquí y me apetece comer algo así que si quieres lárgate tu. -me defendí, queriendo ganar la discusión esta vez. Pero ahí no acabo todo.
-Estaba aquí primero, así que por favor, vete a la mierda. -yo me acerque a él.
-la tengo al lado.
-Conmigo no te pongas con boberías niñata.
-Me pongo como me da la gana.
-Eres una puta guarra, a mi no te me acerques por que me das asco. -eso me dolió y mucho. Pude notar como por mi mejilla corría una pequeña lágrima.
-Tampoco es que me quiera acercar a ti...
-Pues que raro... porque todas lo desean.
-¿Desde cuando yo soy ''todas''? Antes estaría con un mono.
-serían tal para cual, pero tu eres más fea, más guarra y más estúpida, la diferencia es que el mono es mejor que tu. -me dijo mientras se acercaba a mi.
-Justin, déjame en paz.
-¿pasa algo? -estaba muy cerca de mi y me acorralaba contra la pared.
-¡¡¡Te Odio!!! -le grite.
-¿Por qué me odias? ¿por decir la verdad? Michelle eres una puta, una zorra, una guarra que no sirve para nada... -decía apegándose cada vez más a mi. -Eres una gilipollas, ojalá te fueras de mi casa. -no entendía porqué me trataba tan mal, no sabía que le había hecho.
-¡Ni se te ocurra hablarme así! -intentaba defenderme aunque fallara, no sentía mi cuerpo, era como si me clavaran un puñal con cada insulto.
-Y ahora quién eres, ¿mi madre?
-No, y menos mal que no lo soy porque yo no te aguantaría como lo hace ella, ¡eres un inútil! -dije mientras lagrimas recorrían mi rostro, ya no me importaba que lo viera. Justin apretó los puños y la mandíbula, me miró fijamente y se acerco a mi oreja.
-Al menos yo tengo madre... -susurró. Entonces me derrumbé, caí al suelo llorando y con los ojos rojos, mi pelo me tapaba el rostro. Justin salió de la cocina y me dejó ahí, tirada, llorando y muerta. Estaba al borde del abismo y Justin consiguió empujarme, haciendo que me cayera. ''Lo odio'' -pensaba. Pero no era suficiente, me odiaba a mi misma aun más. Me quedé ahí, llorando y temblando, no podía parar. Entonces me levanté débil y temblorosa.
Me agarré a la puerta para no caerme y me dirigí a las escaleras, las subí con cuidado y llegué a mi habitación. Cerré la puerta y me pegué a ella, caminé un poco más y me senté en la cama, donde seguí llorando. Estaba ahogada en lagrimas y en pensamientos. Mi pasado me atormentaba a diario y mi mente solo se concentraba en lo malo, cuando creía que había tocado fondo y que ya las cosas no podían ser peor me ocurre esto. No soy nada ni nadie, no merezco vivir, estoy sola en este mundo cruel. Y lo mejor será desaparecer de él.
Caminé hacia el baño y cerré la puerta. Abrí un cajón y saqué una cuchilla y una toalla pequeña, dispuesta a desaparecer para siempre. Me senté en en el váter y puse la toalla encima de mis piernas. Seguía llorando, temblando y pensando. ''es por el bien de todos'' -me convencía. Cogí la cuchilla con la mano derecha y estiré mi muñeca izquierda. ''Te odio'' -decía pensando en Justin. Y entonces la clavé y la deslicé, nunca me había cortado de esa manera, tan profundo. Levante la cuchilla y repetí el proceso un poco más atrás, y otra vez, y otra vez, y otra vez. Me había prometido que no volvería a hacerlo y volvía a romper una promesa, estaba angustiada y enfadada conmigo misma. Dejé caer la cuchilla manchada de sangre al suelo, y yo caí también esperando morir desangrada.
La vista se me nublaba y todo a mi alrededor era tapado por una nube negra, la cabeza me dolía y estaba mareada. ''Ya voy mamá'' -fue lo último que pensé.
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pues espero que os guste... si es así comenten y voten... pronto subiré el próximo capítulo. gracias por leerla <3