Capítulo 3: La verdad sale a la luz

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- ¡Este fue el árbol que atravesó, y este es su anillo! -Exclamó Saúl con fuerza y alegría- ¡por fin tenemos una pista de dónde pueden estar, nuestra primera pista!

Los seis amigos se dispersaron para buscar huellas, pelos o diferentes pistas que les ayudaran para descubrir el paradero de su compañera.

- He encontrado un camino de huellas -dijo Tomás- ¿reconoces este camino, Saúl?

Siguieron a Tomás y Saúl le confirmó sus sospechas y siguieron los pasos. Las huellas cada vez se alejaban más, hasta que llegó el momento en el que salían del recinto escolar. Saltaron la verja de uno en uno y siguieron su camino. El rastro les llevó hasta el pequeño parque que tenían cerca del instituto y ahí terminaban las huellas, se pararon y Mario escuchó algo.

- Escucho su voz en mi cabeza. Sí, es ella claramente, está aquí cerca -dijo Mario entusiasmado- Saúl si está aquí, ¿crees que podrás ver dónde está?

Saúl afirmó con la cabeza y cerró los ojos, respiró profundamente y extendió los brazos. Al abrir los ojos se volvieron de nuevo de color verde y sonrió. Parpadeó, se relajó y dijo:

- ¡Seguidme, ya sé dónde está... y con quién!

Fueron a través del parque, estaba vació en ese momento ya que los niños estaban en horario escolar, pero había una cafetería al otro lado en la que se podía ver a unas cuantas personas, entre ellas a Alba y su profesor de química, D.Fidel.

- Habéis llegado todos bien, os a costado un tiempo, pero necesitaba que un grupo se quedara para que estuvieramos en busca y captura -dijo D.Fidel con tranquilidad.

- La verdad que casi sí -respondió Saúl- tengo visiones y he podido ver a varios compañeros nuestros atrapados en una sala.

D.Fidel se quedó callado por un momento, echó un vistazo al grupo y respondió.

- Lo sé, por eso estáis aquí, nos vais a ayudar a rescatarlos. Estamos en dos bandos, nosotros somos los buenos y no queremos que estos poderes caigan en malas manos, y ya a empezado la batalla.

-  Pero, usted fue el que hizo que este experimento fallara y nos dio estos poderes -dijo Iván

- En realidad no, os contaré la historia -respondió D.Fidel- El día anterior al experimento yo estuve preparando las hojas y poco antes de imprimirlas fui al baño, cuando volví alguien había cambiado los datos de esa hoja, pero no me di cuenta e imprimí las hojas y al día siguiente, sucedió lo que ya sabéis. -Se paró por un momento, dio un vistazo rápido y prosiguió- Una persona me advertió de lo que iba a suceder y llamó a Marcos para que me ayudara. Marcos es metamorfo, y se transformó en uno de los policías. Al volver al laboratorio, recogimos a unos cuantos alumnos, pero no nos dimos cuenta de que otros se iban por otro lado y ahí se separaron los bandos. Nosotros nos escondemos en la planta alta del colegio, en la biblioteca, por ahora nadie a ido a buscar ahí. En la biblioteca todos pueden practicar con sus poderes y mejorarlos.

- ¿Estábais en la biblioteca? -Preguntó Mario.

- Sí, y hablando de los poderes -siguió D.Fidel- no son solo poderes, el experimento, lo que hizo fue desarrollar las Kinesis de cada uno.

- ¿Qué es, Ki...Kineis? -Preguntó Tomás

- El término Kinesis se refiere al control de algo -respondió D.Fidel-, y en su desarrollo se pueden ver varias fases, en tu caso Tomás, tienes chronokinesis, el control del tiempo, en tu primera fase puedes pararlo, más adelante podrás viajar al pasado, y por último, al futuro.

- Entonces, ¿porqué no lo intento? -Dijo Tomás

Cerró los ojos con mucha fuerza, apretó los puños y se concentró.

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