Louis besó una vez más a Liam, que lo apartó con las dos manos.
-Vamos a dormir separados. Da mala suerte.
Louis se alborotó el pelo. Su boda era al día siguiente a las doce del mediodía y Liam estaba convencido de esa bobada.
-Bueno, tú te lo pierdes -Louis se apartó -nos veremos en el castillo de cuento de hadas.
Louis llevaba haciendo bromas del castillo desde el día que lo habían contratado, pero Liam sabía perfectamente que se había enamorado de su ambiente romántico como de cuento de hadas.
Louis dormiría en casa de Niall y Harry y Liam en un hotel.
-Ya quiero que sea mañana... -dijo Louis -espero que no haya sido mala idea invitar a Lottie y a Fizzie.
-No sé, cariño, te mandaron muchos emails. Todos merecemos una oportunidad. Ahora me voy.... -le dio otro beso. -hasta mañana.
Louis le dio las buenas noches a Niall y a Harry y se acostó.
Liam puso la televisión y se quitó los zapatos. Fue entonces cuando sintió sonar su iPhone.
-¿Qué quieres, Lottie? No estoy muy seguro de querer hablar contigo. Bueno, vale. Ven.
Louis se despertó por el teléfono en medio de la noche. Lo agarró y respondió.-Hola, grandullón. Yo también...
-Ha pasado algo. Toma un taxi y ven.
Louis se puso algo de ropa y salió corriendo.
Cuando llegó a la habitación de Liam se encontró la puerta abierta.
Y se encontró allí a Lottie. Y a Sophia.
-Buenas noches... ¿cariño?
-Preguntale a tu hermana qué ha pasado.
-Lottie...
-Tu hermana me llamó para hablar y arreglar las cosas. Pero no vino tu hermana. Abrí la puerta y estaba ella. Se me tiró a los brazos y me intentó besar. Mientras tu hermana grababa.
-Louis, yo...
-Fuera. Fuera de aquí. No quiero verte mañana en la boda. Largo. ¡Ahora!
-Pero Lou...
-¡Ya!
Louis se giró hacia Liam, que se sentó en la cama.
-Siento haberte despertado. Ahora vas a tener ojeras y...
Louis se acercó y se sentó en sus rodillas.
-No me voy a ir -le besó -me da igual la mala suerte. Nosotros hemos vencido los obstáculos y la mala suerte. Ahora contamos uno con el otro. Y la mala suerte no cuenta...
-Quiero que te quedes.
Louis le empujó sobre la cama. Liam se sonrió.
-A pesar de lo difícil que ha sido, míranos. Aquí estamos y nos vamos a casar... - le abrió la bragueta -y sabes que más... Te voy a hacer el amor.
-Eso suena bien.
-Te lo voy a hacer suave... Yo te lo voy a hacer a ti.
-No la toqué. En cuanto me pasó los brazos por el cuello yo...
-No hables de ella -Louis le quitó la camiseta -ni la menciones. No existe.
-Vale...
Louis le empujó hacia la cama, besándolo una y otra vez en el proceso. Se desnudó y se pegó a él, besándole la cara, los párpados, mientras con las manos le acariciaba sus partes favoritas. El pecho, el hueso de la cadera... Y a la vez, sus miembros se rozaban. Louis sentía la presión de la otra erección contra la suya, y con las mano derecha se introdujo en la zona de su trasero. Le acaricio, apartó la mano y buscó ...
-No hay lubricante -dijo Liam -pero no pares.
Louis le besó con fuerza y le puso de lado. Devolvió la atención de su mano derecha al trasero de Liam mientras le cubría de besos cuello y labios y Liam le acariciaba a él. Entonces al fin acercó su erección al ano de Liam e introdujo un poco, juguetón. Se salió y jugó a acariciar las nalgas con su pene. Liam notaba el calor y la humedad del liquido preseminal contra la piel de su nalga.
-Te amo -dijo Louis y empujó, provocando un gemido desesperado de Liam. Louis empujó dos veces y se sorprendio al notar que Liam se venía. Se salió y se pegó a su nalga, dejándose ir contra él.
Estuvieron juntos un rato, abrazados sin hacer nada mas que respirar.
-Durmamos. Mañana es nuestra boda -dijo Louis al fin.
Niall aporreó la puerta hasta que Louis le abrió.
-¡Sabía que estarías aquí! Son las nueve de la mañana. Vamos, Harry ha recibido ya a los estilistas. Y Karen va a venir a ayudar a Liam.
-Voy....
-¡Niall! -Liam gritó tras él. -mira a ver si... Si puedes... Necesito... -se acercó a la puerta -crema para ya sabes donde.
-Joder... En el castillo te la doy. Vamos, Louis.
Las siguientes horas fueron un torbellino. Gente entrando y saliendo. Tela que se colocaba, cremas faciales...
Pero ahora Liam estaba de pie, en un pequeño templete de madera adornado con rosas blancas y vestido con un traje gris perla y corbata burdeos, las manos cruzadas y los nervios tomándole todo. Vio detenerse el coche negro y salir de él a Louis acompañado de Harry, su padrino. Louis se detuvo para ayudar a Harry a salir del coche. Liam sonrió. Niall, su padrino, se puso a un lado y sacó su guitarra.
Louis llevaba un traje negro con camisa blanca y se dirigió hacia Liam mientras Niall comenzaba a cantar Little things.
Louis llegó hasta Liam y el funcionario les leyó una serie de formulismos.
-Bueno, ante todo estamos hoy aquí para celebrar el amor. Para unir a estos dos hombres en un vínculo de amor y fidelidad, de estabilidad y compromiso.
Louis apenas sentía las palabras. Ni a las quinientas personas invitadas, incluidas celebrities de primer nivel. Sólo veía a Liam.
Lottie no podía creerse lo que el seguridad de la entrada le estaba diciendo. Ya no era que no tuviese invitación. Es que le habían prohibido la entrada. A la boda de su propio hermano.
Se sentó en las escaleras, rabiosa. Eso no iba a quedar así.
-Os declaro legalmente casados. Podéis besaros.
Entre aplausos y pétalos de rosa, Louis y Liam se besaron. Luego se giraron hacia los invitados y levantaron las manos unidas.
El día resultó ser una nube de amor y felicidad. Recibieron a la gente, se fotografiaron en un reportaje para una prestigiosa publicación gay y luego disfrutaron de la comida.
La familia de Liam y los Storan, amigos, todos disfrutaban y hacían que no veían como los novios no podían quitarse las manos de encima.
Después de comer compartieron la enorme tarta de chocolate recubierta de nata. Y su primer brindis como recién casados
Llegó la hora del baile. Habían decidido abrir el baile con algo diferente y especial. Dieron los primeros pasos de un vals y entonces empezó la coreografía ensayada de No Control.
Todo estaba yendo perfecto.
Bailaron, rieron, brindaron.
Louis miró el reloj y luego a Liam con coquetería.
-Son las nueve de la noche... ¿Vamos a...?
Un revuelo, gritos. Niall bajó de una de las habitaciones de invitados del piso de arriba con pantalón de pijama y descalzo.
-¡Que alguien llame a una ambulancia! Harry no se encuentra bien.
