Killer |Sam Wilkinson AU|

Capítulo 33

París, Francia
Sam

Caminaba junto a Camille hacia el departamento en un silencio cómodo.
Mi brazo estaba al rededor de su cintura formando así un abrazo. En cada semáforo en rojo me tomaba mi tiempo para observarla.

¿Cómo una chica como ella puede amar a un monstruo como yo?

Hay veces que me da miedo de que todo esto sea un sueño, uno de los mejores que he tenido.
Tengo miedo de despertar y estar en aquel apartamento que se asemeja a una caja de zapatos de un recién nacido y que apenas puedo pagar.
Despertar sin ver su cara y la sonrisa que me regala con los ojos cerrados, no tenerla a mi lado. Eso me aterra.

Pasados unos minutos llegamos al edificio.

Al abrir la puerta la única luz que iluminaba el comedor era la que entraba por el ventanal.

-Voy a cambiarme. - Dice un me da un beso suave.

Camino en dirección a la cocina pero el grito de Camille hace que salga corriendo hacia la habitación. Cuando puedo hecha un vistazo me encuentro a Nate sentado en la cama con una cuchilla en una mano y un arma en la otra.

-Hola, Sammy- dice con odio.

¿Cómo se supone que tenga que actuar ahora? ¿Por qué ha llegado de improvisto?

-Por lo visto ninguno va a decir nada. Empecemos con las preguntas. Pueden sentarse si quieren. Tú, - apunta a Camille con en arma- siéntate aquí. - Apunta un lugar junto a él.- Sammy, tu te puedes sentar en el piso o en aquella silla da igual pero siéntate en frente mio.

Camille, con miedo, se sienta junto a él y yo me siento en el piso. No quiero perder de vista a Nate.

-Bien. Voy a hacer unas preguntas y quiero que contestes. - Dice y yo solo asiento. Si actuó como si no le tuviera miedo puede que esto salga bien. -Empecemos por... La comida. ¿Por qué se ve bien alimentada? -Pregunta mientras pasa la cuchilla, desinteresadamente, por él cuerpo de Camille.

A ese acto lo tomo como que si no le gusta la respuesta dará un cartel en algún lado.

Camille

En lo único que soy capaz de pensar es en el frío metal que pasa por mi cuerpo. Este es pasado suavemente por mis muslos y mis brazos. No lleva a hacer cortes, pero me temo que en cualquier momento lo hará.

Tengo los ojos cerrados fuertemente por miedo a ver lo que tenga enfrente. Mi cerebro se apagó y no escucho nada mas que mis horribles pensamientos.

¿Si me clava la cuchilla en las costillas?¿Y si me corta la cabeza, siendo así una muerte rápida? ¿Y si me corta pedazo por pedazo para que sufra antes de morir?

Siento una mano en mi boca y el metal ser pasado rápido y con presión, para lograr un corte, en mi muslo derecho.
Un grito desgarrador que es tapado sale de mi garganta. Lágrimas que antes estaban acumuladas deciden bajar. Una tras otra y otra.

Un susurro es lo único que escucho, y me gustaría no hacerlo.

Mis ojos se abren y miro a Sammy sin creer las palabras. Su mandíbula esta apretada, aparentando furia, pero sus ojos me miran con terror y lamento.

Estoy hecha un lío. Mis ojos parecen cascadas y mi mente solo tiene el recuerdo de cinco palabras. No se como sentirme, furiosa, engañada, triste o decepcionada.

No soy consciente de que me tiran del brazo bruscamente, tampoco de los gritos, de las pisadas o del aire fresco. Se que me recupero cuando siento náuseas. Esto en la parte trasera de un auto. Las nauseas aumentan, le aviso al conductor que pare pero no me hace caso. Un gusto ácido se siente en mi garganta y me doblo mirando abajo para poder vomitar y después de eso todo se vuelve obscuro.