Eran cerca de las 8:30 AM, la reunión de accionistas estaba por terminar y Kate no llegaba. Sin más asuntos que tocar, se dio por decisión final que el empleo de la nueva fotógrafa del club seria para la hija de David Argent (Kate) quien pensó que una oportunidad como esa no la merecía una muchachita tan malcriada y desvergonzada, en cambio; el presidente del club estaba al tanto del excelente trabajo que hacia Kate con sus fotografías, aunque su comportamiento era un tal inmaduro debido a todo lo que se decía en la prensa de ella "una chica de vida nocturna y bebidas". Tenía su plena confianza en ella en que jamás lo decepcionaría pues Kate le tenía un grato cariño debido a que Rummenigge era un gran amigo de sus padres y la conocía desde que era una pequeña niña.
Cuando al fin llego Kate con un gesto de tranquilidad en su rostro (a pesar de lo ocurrido minutos antes en el estacionamiento) –lamento la tardanza pero el tráfico fue fatal!!-
–como te atreves a llegar tan tarde?!- cuestiono David molesto
–ya di mis razones- respondió con indiferencia
–Kate que bueno verte de nuevo!-dijo al fin Rummenigge quien se levantó para abrazar a la que era su aijada
–aun sigues siendo ese hombre encantador!!- bromeo
–y tu una jovencita muy bromista- rio –cuanto has crecido, la última vez que te vi eras una niña pequeña
–a pesar de eso aún sigo siendo la niña de tus ojos!!- un segundo abrazo fraternal recibió de parte de la chica quien guardaba un inmenso cariño por su padrino, es más, podría decirse que veía a Rummenigge como un padre aún más que al mismo David
–no te has perdido de cosas importantes solo debes saber por ahora que eres la nueva fotógrafa del club-
–Sera un placer trabajar para tu club- su sonrisa no era del todo emotiva como esperaba Rummenigge, más bien era una sonrisa de rutina, nada especial
La reunión termino y cada uno de los accionistas tomo su camino, Kate quedo como la fotógrafa oficial del Club Bávaro, aunque la fotografía era una de sus pasiones no se sentía muy cómoda con la noticia, "ser parte" del Bayern Munich era algo similar a lo que vivió en Dormunt y no desearía volver a repetirlo.
Su madre le pidió acompañarlos a su enorme casa pero esta prefirió irse por su parte, desde que se marchó de Dormunt, Kate se había distanciado de sus padres especialmente de David con quien nunca tuvo una buena relación.
Abrió la puerta del conductor y se subió en el auto, al cerrar la puerta dejo caer su cabeza en el volante, todo había sido perfecto de no ser por el instante en el jardín cuando volvió a ver a Gotze después de cuatro largos años, lo que más la confundía era entender que a pesar de tanto tiempo aun le despertaba la misma atracción de antes pero lo que no quería aceptar es que aún seguía enamorada de él.
Llego la tarde...
Condujo hasta la agencia donde trabajaba, se encontró con los chicos que pasaron la noche en su departamento. Estando allí, se acercó a la oficina de su jefe quien ya la esperaba
–Pasa Kate-
–Antoni lo siento, tuve que asistir a una reunión con mis padres que no podía ignorar-
–no hay problema, lo sé todo, fue tu madre quien me puso al tanto- le explico su jefe
–entonces también te puso al tanto del empleo?-
–por supuesto! Ella y dos gerentes más vinieron en busca de un buen fotógrafo así que decidí escogerte a ti para la entrevista-
–no tenías por qué hacerlo Antoni, pudiste haberle dado la oportunidad a alguien más-
–no tuve elección, el presidente Rummenigge pidió estrictamente que fueras tu además eres una de los mejores fotógrafos que tenga esta agencia
–como sea-
–No te veo muy feliz por el empleo-
–sabes que la agencia es mi vida entera-
–es eso o hay algo más?-
–qué otra cosa podría ser?- cuestiono con un tono nervioso en su voz, esa solo era una excusa para lo que en verdad la incomodaba y era tener que ver a Mario todos los días de ahora en adelante
–Esta será siempre tu casa pero ahora debes dar un paso adelante en tu profesión-
–Te extrañare Antoni-
–al igual que yo, será difícil no volver a ver ese rostro tan extrovertido y rebelde que te caracteriza- rio
–prometo que no los abandonare-
–Tienes una oportunidad para comenzar de nuevo, alcanza tus ambiciones-
–lo hare, lo prometo- sonrió
Al salir de la oficina fue en busca de las pocas pertenencias que tenía allí, luego de recogerlas se despidió de todos y salió directo a su auto; Aiden y Jenna iban con ella.
-se encontraban en un café cerca de la agencia-
–así que aceptaste el empleo, me alegro por ti pequeña- dijo Aiden
–gracias Ai, pero los extrañare demasiado!! Por favor no me olviden- bromeo
–No exageres Kate, vivimos en la misma ciudad, no es como si te fueras del país- bufo Jenna
–pero a quien le pediré galletillas de fresa?- casi llorando
–Puedes comprarlas- rio y luego dio un mordisco a la galleta
–mmm pero hay algo mas o me equivoco?- dudo Aiden
–Comienzo a creer que eres psíquico- bromeo Jenna
–Como sé que es lo único que quieren saber no les mentiré, si sucedió algo más-
–comienza a soltar todo lo que tienes por decir-
–de camino a la dichosa entrevista choque con Mario Gotze-
–el chico sexy del que nos contaste, el futbolista?-
–cambio demasiado, ya no es el mismo chico tierno de antes, ahora es un completo idiota-
–Pero en la forma como lo dices aun te importa- aseguro Aiden
–importarme?- rio sarcásticamente –el hace parte de mi pasado-
–mmm pues eso tendrás que demostrarlo en este instante porque ese hombre que entro ahí es muy parecido al sexy de Mario Gotze- agrego Jenna
–enserio?- su sarcasmo no duro mucho cuando vio con sus propios ojos que lo que decía su amiga era real, Gotze entraba al lugar junto a dos chicas, una de ellas era su hermana y a la vez la incondicional amiga de Kate
–Kate!!- la chica logro llamar la atención tanto de Kate como la de Mario quien noto su presencia y quien no podía quitarle la mirada de encima.
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Oscuro Atardecer (Mario Götze)
Hayran KurguHasta que punto una promesa te puede lastimar?