Los Gemelos Anouk.
El pequeño Nathan miraba como su padre caminaba de derecha a izquierda en toda la sala blanca.
El odiaba los hospitales, por lo que sabía su madre estaba en una sala junto con los doctores que la ayudaban a sacar a sus hermanitos del estómago.
El pequeño niño de ocho años tenía miedo, su mejor amigo odiaba a su hermana pequeña, porque por su culpa su madre murió. Nathan no quería perder a su madre, pero tampoco sentía ningún rencor hacia sus hermanitos ya que siempre quiso tener uno, y ahora podía tener dos.
No los quería perder ni a ellos ni a su mami, por eso estaba impaciente desde hace ya muchas horas atrás, desde que esos señores vestidos de blanco se llevaron a su mami junto con su abuela (la señora había insistido en entrar junto con su nuera)
Nathan decidió dibujar, empezó a dibujar todas las aventuras que pensaba tener con sus nuevos hermanos.
Cuando termino de dibujar su padre se le acerco.
- Nat, ¿Estás listo para conocer a tus hermanos?-
El padre como cualquiera tenía una expresión de felicidad en su mirada, como cualquier otro que está apunto de conocer a sus hijos.
- ¡SI!-
Nathan se levantó y se dejó guiar por su padre. En el camino a la sala de maternidad, Nathan no dejaba de hablar de lo que haría con sus hermanos, su padre lo escuchaba con una sonrisa divertida en los labios.
Al llegar a la sala de maternidad su padre lo alzo en brazos y lo acerco al vidrio, donde se podía ver a una gran cantidad de bebes.
- ¡Waaa! Todos eso son mis hermanos-
El padre rio por las ocurrencias de su hijo, mientras que Nathan en su inocencia se preguntaba como todos esos niños pudieron caber en el estómago de su madre.
- No campeón, tus hermanos viene haya-
Nathan siguió la dirección donde su padre apuntaba, encontrándose a su abuela y una enfermera entando a la sala, cada una con un bebe.
Su abuela y la otra chica pusieron a los bebes en una incubadora y las acercaron al vidrio para que Padre e Hijo pudieran ver a los nuevos integrantes de la familia.
Uno de los bebes tenía un gorro y guantecitos morado y una manta rosa la cubría por completo, a excepción de sus bracitos que los movía inquieta.
El otro bebe tenía un gorro y guantecitos celestes y una manta de un azul más oscuro lo cubría de completo. Pero él bebe se miraba inquieto y no dejaba de moverse inquieto.
- ¿Son ellos?-
Nathan pregunto incrédulo, viendo a los bebes que estaban ahí.
- A si es, Te Presento a los gemelos Bonnie Anouk Phoenix y Bobby Anouk Phoenix-
- ¡Waaa! ¡Que Genial!-
Nathan empezó a hacer estos graciosos y ruiditos tratando de llamar la atención de ambos bebes. Pero al no conseguirla volteo a ver a su padre con un puchero.
- ¿Cuándo podemos llevarlos a casa?-
- Cuando los doctores los revisen y den el visto bueno para llevarlos a casa con tu madre, podremos hacerlo-
Nathan asintió a pesar de que no entendía muy bien lo que decía su padre. El pequeño solo quería llevarse a sus hermanos a casa lo más rápido posible.
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El los dos días Nathan estaba que saltaba de felicidad por todo el lugar, Su madre y sus hermanos ya podían ir a casa.
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La Travesuras de Los Gemelos Anouk
Short StoryConoce a Bonnie A. Phoenix y su gemelo Bobby A.Phoenix. Ven y lee todos los probemas que enfrentan desde su nacimiento.