peligrosa obsesion (justin y tu)

❤Capitulo 45❤

Un hijo suyo. Trataba de hacerse la idea. El quería tener hijos y tenerlo con ella sería maravilloso. Pero no de esa manera. Y después de todo aquello estaba muy mal. Su hijo podría nacer con problemas. Claro que podría salir con problemas, tenían la misma sangre maldición. Estrujo las sábanas con todas sus fuerzas mientras sollozaba.


¡Demonios! Como haría para saber si estaba embarazada o no, sin que ella sospeche nada. Pensó, pensó y pensó. Claro, debía de decirle que su médico necesitaba una muestra de orina, como suele pedirle cada mes. Solo necesitaba comprar las pruebas de embarazo.


Salió de su casa sin siquiera decirle nada a su hermana y fue hasta una farmacia. ¡Joder! Compro uno de esos frascos y las pruebas de embarazo.


-¿Esta seguro que quiere diez pruebas de embarazo? – pregunto estupefacta la joven que lo atendía.

-Si, por favor -respondió nervioso. Solo deseaba volver a su casa y hacerle la maldita prueba a su hermana.


Llego a su casa y guardo las pruebas en su habitación, ahora necesitaba hablar con su hermana. Esperaba que le creyera y solo le diera la maldita muestra para que el pudiera saber si lo estaba o no. Agarro el frasco y se lo llevo.


-____ -entro en su habitación. Estaba leyendo.

-¿Que pasa Justin? -ella lo miro confundida.

-Solo te aviso que tú médico llamo y pidió que le envíes una muestra de nuevo. -ella frunció el ceño.

-¿Pero por qué? El miércoles le envié una.- Justin se puso nervioso.

-No lo sé, y no me preguntes. Solo lo necesita -le entrego el frasco- dámela luego ¿sí? Puedo llevarla.

-No hace falta, le diré a mama -Justin se tenso.

-No, -casi grito- Amm.. Yo iré a ver a Ryan, puedo llevarla.

-¿Estás seguro? -el asintió- está bien. Espérame aquí.


___ entro al baño y Justin suspiro de alivio. ¡Joder! Estaba tardando demasiado. Hasta que al fin salió y le entrego el frasco en una bolsa.


-Toma -le entrego el frasco sonrojada ¡maldición! Se veía adorable.

-Me iré a cambiar y luego la llevo -ella asintió.


___ volvió a sus libros y el salió yéndose directo a su habitación. Cerró su puerta con llave y luego fue al baño. Tenía ya la muestra y las malditas pruebas. Estaba demasiado nervioso joder. Abrió el frasco y puso las diez pruebas una por una dejándola sobre el lavadero. Cuando al fin paso todas, derramó el contenido y tiro el frasco en una bolsa.


Espero hasta que al fin pudo saber el resultado. Miro y se quiso morir en ese mismo instante. Todas marcaban dos rayas rojas. Todas. No había ninguna que podía dejar a la duda. Se tiro al piso y comenzó a llorar en silencio. ¡Mierda! Su hermana estaba embarazada. De él. Y ella ni siquiera sabía que habían tenido relaciones.


¿Qué dirían sus padres? ¿El les diría la verdad? ¡Maldicion! Solo quería huir lejos. Se levanto con pesar del suelo tiro todas las pruebas de embarazo con sus cajas en la misma bolsa que el frasco y se lavo la cara. Cerro la bolsa, salió del baño y agarro sus llaves