AGARRA EL TIMÓN

Capítulo 1 parte 2

Como a mi me ha tocado hacer la compra esta semana, pensé en preguntarles a mis compañeros que iban a necesitar.

Cuando fuí a preguntarle a Marco lo pillé junto a Natalia haciendo ojitos, muy acaramelados. Como era el segundo día pensé que no era nada.

Me atreví y con voz firme y dulce dije: -Marco, Natalia, perdonad que os interrumpa, pero como me toca hacer la compra había pensado que podríais apuntarme en un papel las cosas que queréis, voy a decirles a Alberto y Lorena lo mismo, me traéis el papel ahora porfavor. - Cuando acabé de hablar desee no haber empezado. Natalia se quedó mirando con cara de fastidio como si le acabara de arruinar su intento de beso. Marco reaccionó al instante, apartó rapidamente al verme su mano del culo de Natalia y me dijo: - Claro Cristina, te la llevamos ahora mismo, gracias.

Respondí con una sonrisa y media vuelta. Me dirijí hacia el pasillo a buscar a Lorena y Alberto. Ellos por suerte no estaban juntos. Lorena me dijo lo que necesitaba al momento.

Fuí a por Alberto. Toqué la puerta de la habitación con suavidad para molestar lo menos posible, y seguidamente le pregunté a Alberto que necesitaba y él me contestó: -Pasa, porfavor.
Pasé, y me lo encontré sin camiseta. Él rápidamente me pregunto si me molestaba que estuviera así, le contesté que no pero que se diera prisa en darme el papel.
Salí casi sin el papel de aquella habitación.
Voy al supermercado más cercano, con lo sucedido con Alberto en la mente. Bajo la mirada para mirar la lista de lo necesario, lo primero que leo: HUEVOS.
Huevos es lo que hay que echarle al asunto.-Pienso.
Voy por el pasillo en busca de ellos, hasta que los encuentro, vuelvo a mirar la lista y lo siguiente: pechuga de pavo, allá vamos pechuga, ya te tengo. De repente miro lo siguiente y me doy cuenta de que son muchas cosas y yo solo tengo dos manos, así que pienso en ir a buscar un carro. Y bendita la hora.
Cuando giro la esquina del pasillo me estampo con algo que debido a la fuerte colisión de mi frente contra ello no consigo ver. Abro, y cierro los ojos y veo a un chico joven, rubio, guapísimo. Mis mejillas creo que empiezan a sonrojarse y de pronto...