Es simple, le amo

10. Castigada ✓

Después de contarle a Jace todo lo ocurrido me quedo más tranquila. Además me perdona por lo que le he dicho y quedamos como si nada hubiera cambiado entre nosotros. Me despido de él y entro en mi casa.

—Mamá, papá... Siento mucho todo lo que ha pasado hoy. Yo no soy así y simplemente quiero que sepáis que lo siento mucho.

—Lo sabemos Kate pero aun así tomaremos medidas para que no vuelva a pasar.

—Me lo imaginaba...—murmuro.

—Hemos visto que no podemos evitar que te veas con Jace así que... Permitiremos que estéis juntos con varias condiciones—dice mi madre.

—Antes de nada saber que Jace se va a marchar a estudiar fuera en un par de semanas...

—¿Sí?—pregunta mi madre dudosa.

—Sí... Se va a Londres—digo mirando al suelo.

—Aun así habrá condiciones—dice mi padre serio.

—Tienes que pedirnos permiso para quedar con él.

—Umm... Vale.

—Si mantenéis relaciones sexuales quiero que hables con nosotros—dice mi madre y yo me pongo roja.

—Aalaa mamá... No hemos hecho nada...

—Mejor, pero aun así... si llegáis a hacer algo queremos que nos lo digas.

—Vale...—JA.

—Por último... Las cenas, comidas o fiestas familiares se anteponen a quedar con él y si te decimos que no puedes quedar ese día con él ni se te ocurra contestar o enfadarte porque en ese caso te prohibiremos completamente que le veas.

—Vale.

—Y ahora... Las consecuencias de haber montado esa escena en la cena—dice mi padre—estás castigada sin móvil 1 mes entero.

—¡¿QUÉ?! ¿UN MES? ¿ESTÁIS LOCOS?

—Sí. Un mes. Y el castigo empieza ahora así que dame el móvil.

—Déjame que se lo diga a mis amigas o por lo menos déjame ponerlo en mis redes sociales y estado de Whatshapp.

—No, Kate. Dame el móvil.

—Por favor...

—He dicho que no Kate. Dame el móvil.

Lo saco de la mochila y se lo doy de mala gana.

—¿No quieres apagarlo?

Se lo quito y lo desbloqueo, después lo apago y se lo doy.

—Y con respecto a lo que te ha pasado en la calle, no podemos poner una denuncia así que lo mejor es que quede en el olvido. Pondremos al tanto a la comunidad de vecinos pero no podemos hacer nada más. A partir de ahora no estés por la noche sola en la calle e intenta evitar los lugares con poca gente...

—Vale mamá, buenas noches—digo y subo las escaleras para ir a mi habitación.

Cierro la puerta y segundos después mi hermana entra.

—Hola... ¿Qué te ha pasado?

—Nada importante, no te preocupes.

—Aah... Oye... Mamá y papá han discutido mucho mientras no estabas...

—Es normal que se hayan puesto a discutir.

—Pero han dicho cosas muy feas...

—¿Como qué?