Capítulo I

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En un lugar donde todo era oscuro como las sombras, se escuchaba una voz de una joven que decía en un susurro:
-No quiero desaparecer- Quiero quedarme aquí, - ¿qué podría hacer?
La voz cesó, pero, enseguida se volvió a escuchar y con una voz alegre dijo:
-Si no quiero desaparecer, tendré que hacer que construyan un mundo dentro de mí.- Pero ellos nunca despertarán.

"Muchas gracias, Señor. Siento que me he hecho más fuerte, soy más alegre y me siento bien". Pensé esas palabras una y otra vez.
Me llamo Leia; soy una persona con los cabellos dorados, como el radiante sol, mis ojos son azules como el océano y mi sonrisa divertida. Me considero una persona agradable e inteligente, que se divierte fácilmente.
-¡Hermanita! ¡Buenos días!-es hora de desayunar...- Intervino mis pensamientos una voz conocida.
-¡Jace!-¿No sabes llamar a la puerta? -Dije molesta.
-Pero...-
-¡Ni "peros" ni nada!- ¿Te imaginas lo vergonzoso que sería si me hubieses visto cambiándome?
-No pasa nada, tu no tienes cuerpo que enseñar- Respondió convencido.
Fruncí el ceño, y fuertemente le dí un pueñetazo en el estómago haciendo que se cayase al suelo. -¡Idiota!-
-Lo siento- Dijo Jace sarcásticamente.
-¿Que hay para desayunar?- Pregunté acariciandome el cabello.
-¡¿Eh?!- Nada...-Dijo Jace nervioso.
-¿Qué?-¿No hay nada para desayunar?- Tengo mucha hambre.- Dije tristemente.
-¿Te crees que lo iba a hacer yo?-Sonrió Jace.
-Bueno... Lo haré por mi hermanito mellizo- Acaricié suavemente su cabeza, jugando con sus cabellos dorados.
Jace, era mi hermano mellizo nuestros rasgos eran los mismos: el mismo pelo, los mismos ojos, la misma sonrisa...

De camino al instituto, con un refrescante aire que alzaba mis cabellos dorados, como si fueran finos hilos de telaraña volando libres.
Me sentía bien, ese refrescante viento me acariciaba bruscamente mi fina piel, pero, no me importaba, me sentía libre; por eso empecé a correr rápidamente dando grandes saltos en el aire.
-¡Leia! ¡¿Qué haces?!-Gritó mi hermano empezando a correr el también.
-¿¡A que no me pillas!?-Le dije con con una cara burlona.
Jace soltó una carcajada y empezó a correr más rápido.

Jace se acercaba a mi, cada vez más, pero, no iva a permitir que me ganara, así que aceleré mi carrera. Lo adelanté pero, estaba muy cerca de mí, yo seguí corriendo durante unos cortos minutos más. Se me ocurrió mirar hacia atrás, pero, no vi a Jace.
"¿¡Dónde está!? " Pensé.
Giré la cabeza al frente y sonreí, vi que me acercaba a el instituto.
"¡Voy a ganar!" "¡Voy a ganar!"
Solamente me faltaba pasar de frente un carril que estaba muy cerca del instituto.
Pero algo ocurrió al pasar por enfrente del carril, Jace salió de el a una velocidad increíble, no se dio cuenta de que estaba pasando.
"¡¡Vamos a chocar!!" Pensé asustada.
Yo cerré los ojos fuertemente y pare de correr. Pero, no chocamos. Abrí los ojos lentamente y ví a mi hermano ofreciéndome su mano y yo se la estreche.
Me miró con un brillo en los ojos como nunca antes los había visto y me sonrió.
-Dejémoslo en un empate-Me dijo.
Yo quede sorprendida , nunca mi hermano me había dicho: "dejémoslo en un empate" si no hubiera dicho que el es el ganador o algo parecido.
Pero, me sentí feliz al escuchar algo así de el y también le sonreí.
-Pero, casi te gano- Sonrió- Si no te hubieses puesto en medio podría haber ganado.
Yo abrí la boca decepcionada porque mi hermanito de siempre había vuelto.
Sonreí maliciosamente y le cogí del pelo estirándolo para que le doliera.
-¡¡Leia!!- Se quejó- ¡Me haces daño!
Yo empecé a reirme y le solté.
-Vamos a entrar si no llegaremos tarde- Dije aún riéndome.
Jace no respondió, solo me miró fijamente.
-Mirad- Se escuchó una voz de una chica- Los atontaos del pueblo.
-¡Miriam!- Dije enfadada.
-¿Te crees una corredora profesional por venir corriendo al instituto?-Sonrió maliciosamente.
Apreté los dientes fuertemente pero, enseguida sonreí.
-¿Y tú te crees un modelo por ir maquillada al instituto?-Me rasqué la cabeza.-Si realmente quieres maquillarte vete al circo.
Miriam me miró con una mirada de odio.
Un montón de gente se puso alrededor nuestro incluyendo a Jace.
-Si realmente me odias tanto...-Vacilé - ¿Por qué no te vas a otro instituto?
-¿Y por qué no te vas tú?-Respondió nerviosa.
-No quiero pelear contigo, ¿quieres ser mi amiga?-Le sonreí.
Miriam frunció el ceño y me dijo fuertemente:
-¡Si fuera tu amiga! -¡Sería solo porque me habrían pagado! - Me cogió de la camiseta.
La miré seriamente y suspiré:
-Así que dinero, ¿no?-La empujé para quitarmela de encima.
Le dí la espalda y caminé hacia la entrada del instituto, pero, me paré y aún de espaldas le dije:
-Cuando quieras ser mi amiga de verdad...-Mordí mi labio inferior- Te esperaré con los brazos abiertos.
Miriam parecía estar enfadada sentía como me clavaba la mirada en la espalda.
-¡¡Jamás!!-Gritó.
Volví a suspirar.
-Siempre- Respondí.
Seguí caminando hacia la entrada.
-¡Leia!-Me llamó mi hermano corriendo detrás mío.-¡Espérame!

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⏰ Última actualización: Apr 22, 2016 ⏰

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