Mi San Valentín ➳ HunHan

HunHan

SeHun miró la hora en su reloj de muñeca, tan solo faltaban cinco minutos para que dieran las ocho de la tarde y él ya se encontraba en el parque con un ramo de flores de distintos colores en su mano ¿sería demasiado? él tan solo quería darle un detalle a LuHan. Miró al cielo viendo como los primeros copos de nieve caían sobre su cabello rubio y su chaqueta gris. Estaba impaciente por ver si Luhan iba a venir o tan solo le iba a dejar plantado, aunque si lo hacía no le podía reprochar nada porque había sido él el que se había estado comportando como un acosador mandándole cartas durante once días y mirándolo desde hace meses desde detrás de una estantería o desde el cristal del escaparate. Tan solo quedaba un minuto y este ya estaba pensando que Luhan no iba a venir ¿por qué vendría? aunque la tarde anterior tuvo el coraje suficiente de dejarle la carta en el mostrador después de coger el libro que había comprado. La cara de Luhan fue de desconcierto pero luego al ver la perfecta caligrafía de su anónimo plasmada en el sobre con un LuHan hyung quiso ir detrás de este pero ya era demasiado tarde, SeHun se había marchado con su libro.

Ya eran las ocho y Luhan no había aparecido, la nieve cada vez se intensificaba más y SeHun se calentaba la mano libre como podía. El reloj de la plaza marcaba las ocho y un minuto, y dos minutos así hasta que dieron las ocho y diez minutos y LuHan aún no había aparecido. SeHun miró al cielo y trago grueso mientras contenía las lágrimas que iban a caer en cuestión de tiempo por sus mejillas, se había estado convenciendo en los últimos minutos de que LuHan iba a venir porque él le dijo que quería conocerle, pero tan solo fueron palabras, solo eso... palabras plasmadas en un papel que no significan nada, nada más que mentiras.

(^o^)

LuHan por su parte corría porque llegaba diez minutos tarde y ya pensaba que SeHun no iba a esperar, que se había cansado de esperar por él y se había marchado de allí sin éste poder cumplir sus deseos, aquellos deseos que plasmó en su última carta. Contempló la nieve caer y con su mano libre cogió algunos copos que cayeron en esta. Buscó desde lo alto de las escaleras del centro comercial a aquel anónimo -no tan anónimo- que le había estado mandando cartas en los últimos once días, su mirada dio con el reloj de la plaza que marcaban ya las ocho y cuarto de la tarde y pronto encontró la el chico rubio de bonitas facciones que esperaba por él en la fuente.

(^o^)

Las ocho y cuarto y SeHun había decidido marcharse de allí, LuHan no iba a venir y lo tenía más que asumido. Se arregló el abrigo gris y dando una última mirada al cielo y al reloj suspiró y caminó en dirección contraria a la que había venido, no quería irse a su casa quería desaparecer por unos momentos y eso implicaba perderse por las calles de Seúl. Una mano ajena agarro la suya dándole un apretón y encajando sus dedos con los de este cuando SeHun apenas había dado cinco pasos. SeHun giro extrañado su cuerpo para ver que la persona que había frenado su huida era el chico que le robaba el aliento: LuHan.

—Acepto ser tu San Valentín.

Fin.