Nota 2

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Puse mis brazos bajo el grifo, el agua ardía sobre mis brazos, me dí una ducha, me vestí esta vez completamente de negro, seque mi cabello, y puse algo de el sobre mi rostro, no era muy femenina pero coloqué algo de maquillaje sobre el golpe que mi padre me había dado, tome mi mochila y salí de mi habitación esta vez ninguno de mis padres estaba cerca tome un vaso de jugo, cepillé mis dientes y salí de casa.

Llegue a tiempo al colegio, fui directo a mi casillero pase frente a Jane y Michael, ambos se burlaron de mi al ver mi nuevo forma de vestir y la manera en que llevaba el cabello.

Abraham había influido tanto en mi, en un día de conocernos era increíble.

Llegué al salón de clases el sentado en su nuevo habitual asiento, se sorprendió al verme de una manera tan distinta a la chica que conoció ayer, me senté y el se acercó a mi.

- ¿ Que paso contigo?

- Me cansé de ser la niña dulce, de la que cualquiera se puede burlar.

Tomo mis brazos y subió mis mangas.

- ¿ Y esto?

- El dolor físico siempre será mejor que el psicológico no?

- Una niña tan linda como tu, no debe jugar con demonios.

- Tú no conoces nada sobre mi, no sabes el infierno que llamo vida, y los demonios que habitan en mi.

- Por esto, tocó el golpe que tenía en el rostro. Puedo jurar que se algo más de ti.

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Hoy nuevamente estábamos en el cementerio, un lugar algo loco para socializar.

- ¿ Porque permites que lo hagas?

- No puedo hacer nada en contra de ellos, son mis padres, si es que merecen llamarse así, y además no tengo a donde ir.

- Te diré algo, jamás volverás a estar sola, cuentas conmigo para el resto de esta vida de mierda que llevamos.

- ¿ Sabes? Nunca nadie se había comportado así conmigo, nunca me habían hecho sentir protegida.

- Mi niña de la sonrisa rota...
...Te protegeré con mi vida si es necesario. Si ellos vuelven a tocarte yo te alejaré de ellos, nadie, hará que tus hermosos ojos vuelvan a derramar una sola lágrima.

Los Demonios Detrás Mi Sonrisa... Donde viven las historias. Descúbrelo ahora