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Y lo hice.
Después de mucho.
Me deje ahogar.

Primero fue lento.
La incredulidad.
Después arrasó con ardor
La ira

Después el odio.
El odio que nubla.
Que llena tus venas.
Envenena tus logros.
Cierra tu garganta.
Hace que aprietes con fiereza tu cabello.
Que te mires al espejo y lo veas
Odio.

Allí la impotencia hace presencia.
Impotencia de querer frenar;
Sea a la sensación o a uno mismo.
Pero no puedes.
Y al parecer nadie tampoco quiere.

El peor error es prestar tu oído.
Prestarlo a lo que te rodea.
A las risas.
A la televisión encendida como siempre.
A ellos.
Simplemente a la vida siguiendo su rumbo sin uno.

Luego...
Simplemente te dejas ahogar.
Por los recuerdos.
Por el odio sumado a la tristeza.
Su mente se nubla.

Listo.
Una débil línea.
Recién hecha.
Formada por elementos muy pero muy peligrosos.
Ira.
Odio.
Impotencia
Tristeza
Incluso amor.

Esa línea la trazas con el rojo de los recuerdos.
El ardor del dolor.

Puedes pensar que allí termina.
Pero la receta finaliza
Con un baño de culpa.
Pura y completa culpa.

Esa siempre sera la sombra de aquellas líneas.
Líneas marcadas en mi
En mi y en mi piel.

don't go awayDonde viven las historias. Descúbrelo ahora