Era la primera vez que pasaba el cumpleaños con personas agradables y así de divertidas, era la primera vez que sonreía en mi cumpleaños… por cada pensamiento que maquinaba una nueva lagrima caía, entonces no aguante y con mi mano cubrí mi rostro mientras lloraba y empapaba los guantes, yo no quería tener dinero, yo quería a tener unos padres que me quisieran, no dos personas maquinando dinero para “mi futuro”.
Me deslice hasta quedar sentada en el cubículo y apoyar mis codos de mis rodillas, mientras mis manos cubrían mi rostro, no quería que me vieran llorar, y ese fue mi noveno error, llorar de tristeza frente a One driection.
Sentí que alguien se sentaba a mi lado y luego unos brazos pasar por mi hombro, mientras un olor bastante agradable y varonil se impregnaba en mi nariz, corrí un poco mis manos y vi que era Louis con una sonrisa ¿siempre sonreía? Yo también quería vivir sonriendo como el…
-¿Qué sucede?- me pregunto Louis
Todos me observaban esperando una respuesta mientras yo con mis manos limpiaba el valle de lágrimas que había trazado mi tristeza.
-Pasa que es increíble que ellos lo hicieran de nuevo- respondí con la voz quebrada
-¿Quiénes?- pregunto Zayn sentándose a mi otro lado
-Mis padres- admití- nuevamente olvidaron mi cumpleaños. Lo han hecho durante 12 años y siempre los perdono, y luego vuelven a hacerlo y vuelven a lastimarme y nuevamente me siento sola- termine susurrando mientras mas lagrimas caían
-Tal vez, no es su intención- me dijo Alba sentándose, todos se sentaron
-¿Bromeas?- pregunte- creería en esa teoría si hubiese pasado tres veces pero ¿12? Vamos no es tan fácil olvidar el día que te volviste madre o padre, por eso me alegra estar aquí, haya me siento sola, soy lo suficientemente “rara” y “torpe” como para no encajar con nadie y no hacer amigos- confesé- y no es porque yo sea una anti social es que las personas con dinero como mis padres acostumbran ir a lugares “exclusivos” a mi me parecen ridículos, total todos somos iguales, el hecho es que asisto a un semi internado con niños de papi y mami, los cuales su meta es comprarse un nuevo auto ¿Cómo pueden haber personas así? Desperdiciando el dinero mientras otros mueren de hambre, no lo tolero y es ahí cuando no congenio con nadie de “mi clase” como dirían mis correctos padres
-¿semi internado?- pregunto Niall
-Si, hacen lo posible por volverme una chica de sociedad, además de que como están divorciados ninguno de los tiene tiempo para criarme todo su tiempo lo consumen peleando y echándose la culpa uno al otro de que yo sea así, solo están para reprenderme pero nunca para aconsejarme, son pocas las veces que los veo y es cuando me meto en serios problemas solo por tener un poco de su atención, por eso no querían dejarme venir, porque sabían que acá no podrían controlarme que acá seria libre- afirme- Y me alegra estar acá, no creo que hubiese aguantado un cumpleaños mas cantándome yo sola cumpleaños ¿soy una chica problemática verdad?
-A mi parece que eres una buena chica- comento Ly con una sonrisa
-Soy una chica sin suerte, rarita y torpe- dije riendo- pero me siento bien con lo que soy, no pretendo cambiar
-Y no lo hagas, no es tan sencillo toparse con chicas especiales como tu- comento Harry pensativo
Ese había sido un momento de confesión, me había nacido contar lo que me pasaba, solo así las lagrimas pararon.
-Odio que mis padres estén divorciados- confeso Alex- siempre veía como los padres de muchos conocidos se separaban y mis padres eran mi esperanza de que el verdadero amor si existía, esperanza que se esfumo cuando una noche me informaron de su separación, decían ya no quererse igual que antes y fue cuando me pregunte ¿si el amor se va a si de rápido para que querer sentirlo? ¿no es que el amor dura? Los cuentos de hadas se esfumaron, ese día o durante una semana llore, sentía tanta rabia, creí que iba a quedarme seca, incluso llegue a hacerme algunas cortadas, pero no paso nada, y fue entonces cuando me prometí no llorar mas, siempre sonreír y verle el lado positivo a todo, solo así encontré paz y logre encontrar mi verdadero yo, ahora nunca paro de sonreír y verle lo bueno a las cosas, y ya se que el amor es como una caja de cristal que si la descuidas se quiebra- concluyo Alex con un suspiro, todos les sonreímos.
