Capítulo 52. Jamás te abandonaría, Alison

113 4 1
                                    

Capítulo 52. Jamás te abandonaría, Alison

Narra Javier

-¡Maya! ¡Espera! –La llamo mientras corro hacia ella.

-Déjame en paz, Javier. –Dice. –Vete con esa y déjame en paz.

-No te voy a dejar en paz.

-¿Por qué no me habías dicho que habías salido con ella? –Pregunta con los ojos llenos de lágrimas.

Porque aún me duele verla y no poder besarla.

Porque aún duele recordarla y que ya no sea mía.

-No lo creí importante. Solo fue una relación de un par de meses, nada importante. –Me encojo de hombros intentando no darle importancia.

Pero qué mentiroso que soy.

Alison nunca ha sido una más y nunca lo será.

-No lo parecía ayer cuando bailabais y cantabais. –Dice.

-Era mi amiga después de todo, Maya.

-No lo parecía. Vamos Javier, se nota a leguas que sentís cosas que unos amigos no sienten.

Mierda, y ahora qué digo.

Maya tiene razón.

-Escúchame Maya, ahora estoy contigo y ahora te quiero a ti. Solo a ti.

-Te amo. –Me dice abrazándome.

No puedo decir lo mismo.

-Te quiero Maya, en serio.

-¿No me amas? –Pregunta mirándome seria otra vez. No la contesté. -¿Por qué? ¿No soy lo suficiente para ti? ¿No soy Alison?

-No vuelvas a lo mismo, Maya. Te he dicho que con Alison no tuve nada serio. –Mentira. –Solo te quiero a ti. Y sí, puede que no te ame, pero aún es pronto. Solo llevamos dos meses.

-Nunca es pronto para enamorarte de una persona.

-Mira, Maya, tú me gustas y quiero hacer las cosas bien, por lo que dame tiempo, ¿sí? –Ella asiente. Sonrío y la doy un beso en la frente.

-No quiero que te arrimes a Alison. –Me dice.

-¿Qué? –Pregunto confuso. –No puedes prohibirme juntarme con una amiga de hace muchos años.

-Mira, Javier, si aún quieres seguir siendo mi novio tendrás que dejar de hablar con ella.

¿En serio que iba a dejar de hablar con Alison porque Maya me lo pidiera?

No, claro que no.

-Está bien. –La digo sonriendo. –Puedes estar tranquila. No hablaré con ella. –Mentira.

-Bien. –Ella sonrió y me besó.

Narra Alison

-Esto no lo voy a permitir. –Dice el padre de David dando vueltas por el salón del apartamento de David. -¿Entendiste? No quiero que te arrimes más a ese niñato.

-Javier no es ningún niñato. –Le digo. –Y voy a hacer lo que me dé la gana. ¿Entendiste? Puede que me vaya a casar con su hijo, pero no por eso va a prohibirme hablar con mis amigos.

-Mira, Alison, atrasamos la boda dos años para que tú pudieras hacer esa película y terminar la carrera. Pero ahora no hay ningún impedimento de por medio y podemos adelantar la boda. –Me dice ese señor.

Sólo túDonde viven las historias. Descúbrelo ahora