Epílogo

23.8K 2K 595
                                    

Bueno... ¡final de los finales! Eso quiere decir que este es el final, no sólo de esta lista sino de toda la trilogía. ¿Qué les digo? Fue todo un viaje, no puedo creer que hace tres años recién estaba presentándoles a Jace y dos años atrás despedía a Lucas, mientras festejaba (creo) mis dos mil seguidores. ¡Una locura! Pero sepan que si esto de las listas continuó fue por ustedes, porque nos recibieron tan bien que simplemente nos dio ganas de seguir volviendo. Así que espero que ustedes hayan disfrutado del viaje, se hayan enamorado de quien se hayan enamorado, sepan que tanto Jace, como Lucas y Neil, les agradecen haberles regalado un poco de su tiempo. 

Y en cuanto a mí, como siempre les digo, fue todo un privilegio haber tocado en este barco con ustedes. 

pd: Los chicos tuvieron una sesión de fotos para conmemorar este momento. Los tres, representando sus historias en orden, obvio ;) 

Epílogo

Escaneé rápidamente el salón con la mirada, intentando y fallando en pasar por alto el bochornoso número que Lara y Bill estaban montando en medio de la pista. ¡Dios! ¿Quién dejó a esas personas sin sus correas? Eran tan agraciados para el baile como una manada de hipopótamos ciegos, e incluso me atrevería a decir que los hipopótamos tendrían mejor desempeño.

Por el rabillo del ojo noté a Jace avanzando por un lateral, con lo que parecía ser una botella de champán en su mano derecha y el saco de su traje en la izquierda. El cura no había acabado de pronunciar el "puede besar a la novia", cuando la mitad de los hombres comenzaron a lanzar sacos por todas partes y a quedarse en todo tipo de camisas. Era una tarde calurosa y se adivinaba una noche igual de ardiente, aunque eso sería más posiblemente para la feliz pareja.

Vi que Jace se detenía junto a una mesa que estaba medio apartada de la multitud festiva y al segundo en que el tapón del champán saltó al aire, supe que allí estaba mi hombre. Me acerqué por su espalda con sigilo y envolví mis brazos alrededor de su cuello, descansando mi barbilla sobre su hombro. Neil me observó levemente de soslayo y luego volvió la vista al frente con aire distante.

—Con que aquí estás, madre desamorada —murmuró, dirigiendo su atención a la personita que dormía sobre su pecho—. Nos dejaste solos por tanto tiempo que estábamos considerando en darnos en adopción a otra mujer. Aquella de la esquina, nos estaba mirando con cariño. —Apuntó con su barbilla a una señora bastante mayor que había sido maestra de Lucas en el jardín de niños y yo no pude evitar soltar una carcajada al verla mirándonos.

Jace sentado en la silla frente a la de Neil, rodó los ojos tomando un trago de champán directo de la botella. Aun cuando aseguraba ser inmune a las tonterías de su amigo, pude ver como una sonrisa traicionera aparecía en sus labios.

—No fueron más de quince minutos —me defendí, frotando mi mejilla contra la incipiente barba que comenzaba a crecer en la suya. Me encantaba cuando se dejaba algo de barba, así como me encantaba que le hubiese permitido a su cabello crecer hasta el punto en que podía hundir mis dedos en él—. ¿Te dije lo sexy que te ves cargando a mi bebé?

Él enarcó una ceja de modo gracioso, echándome una mirada fugaz y al mismo tiempo, completamente cargada de promesas sucias. Besé su delicioso cuello en un impulso, notando como Jace frente a nosotros volvía el rostro hacia la pista y seguramente se apartaba mentalmente de la escena. Él en realidad estaba bastante bien con nosotros siendo pareja, pero una vez me había explicado que siempre había visto a Neil como un hermano menor y al casarse con Sam comenzó a verme del mismo modo, por lo que todavía le costaba un poco congeniar ambas imágenes cuando nosotros decidíamos expresarnos cariño de forma pública.

—¿Cuánto tiempo más para volver a casa? —preguntó Neil, colocando la cabeza de lado para darme mayor acceso a su cuello.

—No mucho, sólo falta que Keila lance el ramo y entonces podremos marcharnos. —Después de la ceremonia, lanzar el ramo sería la segunda cosa normal que ocurriría en esta boda, se los digo. No importó cuánto hubiese luchado Lara por organizar una boda convencional, finalmente Keila terminó imponiendo su toque artístico y único en todo.

Lista del Padre Perfecto. (Libro 3)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora