Sali corriendo, corrí y corrí, me sentí libre, mientras corría hacia el bosque las lagrimas salían de mi, sabia que todo iba a mejorar, que todo iría muy bien, dejaría el pasado atrás, no volvería a llorar.
Cuando llegue al bosque, lo vi, mis pupilas se dilataron y salí corriendo hacia él, sabia que podía confiar en el, sabia que siempre iba a estar ahí para mi, era todo lo importante para mi en ese momento, ver a Spencer, eso era lo que quería ver.
- Sabia que llegarías- dijo
Spencer - siempre podré contar contigo, sabia que nunca me fallarías- en ese momento Empezó a llorar.
- que te paso? Pregunte
- me odia, y me odiara para el resto de su vida, no me dejo ir, si le importaba, no... No se que paso, se me fueron las luces y la eche a rodar por las escaleras- seguía llorando, jamas había visto a un hombre llorar- yo le importaba, si... S..i le importaba, les importamos- dijo.
En ese momento me aparte y le dije
- no sabes nada, no les importamos- le grite y empece a llorar - ella por el contrario, siempre me odio- si tu quieres, vete con ella, pero pensé que siempre estaríamos juntos, se supone que este momento seria el mas feliz de nuestra vida- dije
- el momento mas feliz de mi vida es cuando te conocí- Spencer me estaba asombrando, me estaba enamorando.
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Una salida desesperada.
De TodoUna chica de 17 años ya no quiere estar mas tiempo viviendo en su casa, una casa de problemas y discusiones, solo quiere irse, pero al momento de hacerlo algo pasara
