Un fuerte ruido despertó a Sungyeol, que se levantó de inmediato al notar el extraño lugar donde se encontraba.
"Lo siento" escucho una voz disculparse.
Dirigió su mirada hacia de donde la voz provenía y pudo notar que se trataba del felino de hace unas horas. Sus ojos se abrieron comicamente al recordar algo, destapó la manta que lo cubria ¡no estaba! ¡no estaba! ¡su amada aleta no estaba! Sungyeol empezó a desesperarse.
"¡¿Qué hiciste con ella?!" gritó histérico.
"Tranquilizate, yeollie" dijo su captor tratando de volver a cubrir su cuerpo desnudo.
"¡Devuelmela! ¡devuelvemela!" Comenzó a sollozar incontrolablemente.
El pelinegro lo tomó entre sus brazos y empezo a acariciar su espalda, tratando de calmarlo.
"No sea malo conmigo, señor gato. Yo no le hize nada" siguió llorando el castaño.
"¿Señor gato?" el humano empezó a reir descontrolablemente "sigues con la idea de que me paresco a un gato"
El ser sobrenatural dejó de llorar y miró al extraño con confusión "¿acaso no es usted el señor gato? ¿Ese al que le encanta el pescado fresco como dijo mi amiga?" preguntó.
"Me encanta comer pescado, pero mi nombre no es 'señor gato', soy Myungsoo, tu Myungie ¿acaso no te acuerdas de mi, yeollie?"
"Nunca había oido ese nombre"
Los ojos negros de Myungsoo se llenaron de una profunda tristeza "no te preocupes, estoy seguro de que con el tiempo me recordarás" dijo este con determinación.
Sungyeol lo observó por algunos segundos "¿le puedo hacer una pregunta, señor Myungsoo?" dijo después.
"Lo que quieras yeollie"
"¿Dónde escondió mi aleta?"
Myungsoo fruncio el seño confundido "Me temo que no lo hice" respondió.
"Pero...pero..." balbuceó yeollie.
"Al parecer esta se desvaneció cuando saliste del mar" dijo el pelinegro pensativo.
"¿Eh?" preguntó Sungyeol.
"Tal vez aparezca cuando estes otra vez en el agua" sugirió el humano.
"¿De verdad?" dijo emocionado el tritón, pero se detuvo al recordar algo "¿no se supone que sólo puedo obtener piernas humanas si tomo la poción especial?" susurró para si.
"¿Eh?" dijo el capitán extrañado "¿qué poción?"
Sungyeol sólo negó con la cabeza.
"Volvamos al mar" dijo varios segundos después.
"Yeollie, la verdad es que me gustaría que te quedaras un tiempo conmigo antes de que regresaras" habló Myungsoo con voz suplicante.
"Pero mi hermana debe estar esperándome" respondió Sungyeol.
"Sólo por un tiempo ¿si?" rogó el capitán.
Sungyeol sintió como un deja vu, como si ya hubiera sentido esto antes. Asintió devilmente.
Myungsoo le mostró una hermosa sonrisa antes de abrazarlo con fuerza.
Por una extraña razón, Sungyeol sentía esos abrazos tan familiares.
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Aquel 'por un tiempo' pronto se convirtió en un mes, un mes en el que Sungyeol se había dedicado a explorar el mundo humano como tanto había querido. Un mes donde había llegado a adorar al capitán de Infinite y había olvidado la agradable sensación que sentía su cuerpo al recorrer los bastos océanos en su forma natural.
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I Have Found You
أدب الهواةEl traicionero océano lo había arrancado cruelmente de entre sus brazos y ahora, después de casi cinco años, lo devolvía a él en una mística forma.