Simon se separó de mí con una leve sonrisa que segundos después se esfumó.
-Bien ahora quiero que me cuentes por favor que es esto.-dijo sacando unos papelitos doblados de su bolsillo y no cualquier papelillo sino las notas de aquel o aquella acosadora.-¿Quién te esta mandando estas notas Cassie? ¿Y por qué no me lo has dicho antes?
Mierda, estaba en un lió. Un gran lío.
-Simon yo...-el aludido no me dio tiempo a responder a sus insistentes preguntas ya que siguió hablando.-¿sabes lo peligroso que es esto? Claro que no, por supuesto que no lo sabes.
Dijo moviendo sus brazos con obviedad y mirando hacia mi escritorio el cual estaba plagado de papeles.
-Simon eso es una tontería, seguro que es de alguien infantil que se aburre. No le des una importancia que no merece.-dije poniendo los ojos en blanco.
Simon era demasiado protector, siempre estaba pendiente al igual que mi padre de los movimientos que hacia, de las fiestas a las que iba, la gente con la que me juntaba, etc... Y por supuesto eran un manojo de nervios cuando no podían localizarme.
-Créeme esto es más importante de lo que tú crees Ammie.-dijo Simon bastante serio.
Fruncí el ceño molesta y lo miré fijamente. ¿Por qué había utilizado ese maldito nombre cuando sabía que yo lo odiaba con toda mi alma? Y ¿por qué creía que tenía tanta importancia el asunto de los papelitos? Seguramente dejarían de mandarlos en unos días y se dedicarían a algo mejor que a darme la tarde con sus estupideces.
-No me llames así.-dije señalándolo con un dedo amenazante.
Simon se cruzó de brazos y me miró fijamente sin decir palabra alguna. Sabía lo que intentaba perfectamente, estaba presionándome, culpándome de algo que no había hecho. Pretendía sacarme información de aquella manera tan típica de los dos hombres de la casa.
Me levanté de mi propia cama suspirando cansada de la batalla de miradas que estaba viviendo con Simon e hice intención de marcharme de la habitación no sin antes quitarle de las manos mis notitas.
-Todos estamos en peligro ahora Cassie.-dijo Simon impidiendo que saliera de la habitación con sus palabras.
Me estaba confundiendo. ¿Qué quería decir con todo eso? ¿Cómo podíamos estar en peligro?
Me giré con el ceño aún más fruncido y lo miré un poco cansada de sus juegos.
-No se que dices.-dije cansada y confundida por su actitud.
-Olvídalo.-le quitó importancia Simon mientras se recostaba en la cama agotado.
Bajé la cabeza pensativa y luego me marché. Tal vez hablaríamos más de ello a la hora de la cena, seguro que sería así ya que Simon no se cansaba nunca de insistir e insistir hasta encontrar respuesta a lo que quería. Y esta parecía una de sus grandes cuestiones, ¿quién esta acosando a Cassie?
Ese mismo día por la tarde, debíamos ir al instituto, al parecer iban a hacer una especie de baile en el instituto y nos había tocado a Simon y a mí, junto a más alumnos del instituto, preparar el decorado y demás cosas para la ocasión.
Cuando Simon y yo hubimos cogido nuestras cosas marchamos hacia el instituto. Habíamos cogido como de costumbre mi coche y por el camino no hablamos de nada solo escuchamos la música que emitían por la radio y de vez en cuanto cantábamos algo.
Cuando llegamos al instituto este estaba bastante vacío, a penas había algunas personas pero cuando llegamos a la sala donde se haría el baile pudimos ver a mucha gente congregada al rededor de uno de mis profesores favoritos, el de música. Una serie de sillas rodeaban a la del profesor y en ellas cada uno de mis compañeros.
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Lies
FanfictionCassie ha vivido engañada toda su vida, su familia no es quien cree que es, sus amigos tampoco y pronto se dará cuenta de que sus enemigos son el menor de sus problemas.