Apocalipsis. El Levantamiento De Lucifer

Capitulo 26: Fugitivo.

En los pasillos del rústico Infierno, caminaba pacífico como siempre, acompañado de dos demonios, Dagon. En el bolsillo de su chaqueta tenía una daga de ángel, y en su pierna derecha en un estuche negro cargaba su preciada: Colt Python cargada con balas hechas de hierro fundido de daga de ángel.

Se paseaba por su fracción de infierno, ansioso de tener el liderazgo de TODO el infierno, dominar a todos con solo mover la mano, pero por el momento debía conformarse con una pequeña facción de demonios y ayudar a Vince y sus amigos a detener la ascensión de Lucifer.

"¡¡¡¡DAAAGOOOOOOOON!!!!" se escuchó tras una puerta

-¿Por qué no acaba con él, señor?-preguntó uno de los demonios

-¿Por qué hacerlo?-rió Dagon-Tenerlo ahí es...-hizo una pausa y metió sus manos en los bolsillos de su pantalón-Conveniente, por ahora-explicó mirando hacia el techo

-Pero...si sale, puede matarlo, VA a matarlo-habló la mujer que era la que también los acompañaba

-Puede matarme pero no saldrá de ahí...No con vida, esa habitación tiene un seguro, los seres celestiales no pueden atravesar esa puerta ni hacia adentro ni hacia afuera, los mataría en un instante

-Ya veo...-dijo la mujer levantando ambas cejas

Flash Back...Guarida de John...

John estaba hablando con un demonio, luego de una larga charla sin sentido con él, John le atravesó una daga en el pecho haciéndolo brillar en rojo y luego le cortó la garganta para poner su sangre en un plato junto a un cráneo de gato negro

-daemon qui, in tenebris et vobis auxilium. Petere. Ostende te...-recitó John y luego la sangre se empezó a evaporar cubriendo toda la habitación donde pronto apareció una mujer, JUSTO, donde John quería, en el centro de un pentagrama, símbolo del cual los demonios no pueden escapar

-¿John? ¿Que podría alguien como tú querer de alguien como yo?-habló la mujer, la que estaba con Dagon

-Tu eres una "demonio pactista"... ¿O me equivoco?-preguntó John y la chica volvió sus ojos de color rojo puro para confirmarlo-Ya veo...te propongo un trato-caminó alrededor del pentagrama

-¿Trato?... ¿Y qué podría hacer yo con media alma?-rió la mujer

-Oh, no MI alma...Es un trato de pago adelantado-sacó un frasco de su bolsillo con una luz brillante

-Te escucho-levantó la ceja

-Se que tu eres del "Ejército de Dagon"-resaltó las comillas con sus dedos-Así que quiero que saques a mi...pequeño amigo: Gabriel-mencionó John.

El rostro de la demonio cambió de felicidad a preocupación en un instante

-¿Gabriel?-repitió en forma de pregunta

-Así es...-rió levemente-Se supone que ustedes hacen lo que sea por las almas, y yo te ofrezco un trato único, ¿Lo puedes hacer o no?

-S...si, voy a hacerlo, claro-dijo la demonio asintiendo y John chasqueó los dedos haciendo entonces que el pentagrama a los pies de la misma se queme deshaciéndose

-Es un trato entonces-le lanzó la botella con el alma y esta la agarró-Y también dale esto cuando lo veas-le entregó otra botella-Ahora largo de aquí-ordenó

Infierno...ahora

La mujer, una vez que se separó de Dagon y el otro demonio, se acercó a la habitación donde estaba aislado Gabriel, abrió la puerta y Gabriel levantó la cabeza para observar de quien se trataba

-Un demonio pactista...-rió encogiendose en hombros-¿Dagon está muy ocupado para torturarme el mismo?... ¿O tu también vienes a poseerme ahora?-se burló

-Cállate Idiota...estoy aquí por negocios-la mujer rodó los ojos-undo- pronunció y de repente los ojod de Gabriel se volvieron azules

-Tu no estás del lado de Dagon ¿O si?-Gabriel levantó una ceja

-Ya te lo dije...son negocios

-Así que...John te compró ¿Eh?...astuto-rió mientras la mujer ponía la llave en un cerrojo en la pared que desactivó las esposas de Gabriel

-Me debes una...-la mujer le guiñó el ojo y volvió a cerrar la puerta para aparentar. Un corto tiempo después empezó a sonar una alarma

-¡¿Que?!-se exaltó Dagon levantándose de su sillón y saliendo de la habitación hacia el pasillo donde todos los demonios se preparaban para luchar-Daniel... ¿Que sucede?-preguntó Dagon al demonio más cercano

-Tal parece que Gabriel se ha escapado Señor-informó el demonio y Dagon se quedó helado, pero luego pensó en que la otra ocasión le habían quitado la gracia divina

-No hay problema...-sacó su daga de ángel-Esto debería funcionar en él ahora

-¿Seguro señor? Creí que eso no era suficiente con arcángeles-cuestionó el demonio

-Veamos que le queda de arcángel a ese desgraciado-levantó una ceja y empezó a atravesar a los demonios para dirigirse a donde Gabriel estaba peleando contra sus esbirros

-¡Daaagooooon!-rió y extendió sus brazos como si fuera a dar un abrazo-Hasta que al fin muestras tu cara de idiota ante mí.

Dagon trataba de ocultar su nerviosismo y sacó su daga de ángel

-¿Crees que eso va a matarme?-rió a carcajadas-El tema de trabajar con demonios es...-tomó a uno de los demonios por la cabeza y de su boca y ojos empezó a salir fuego-que consiguen y hacen lo que sea, por un alma-sonrió. Dagon tragó saliva fuerte retrocediendo lentamente

-¿Cómo...?-apenas pudo articular

-A veces...los ángeles también podemos tener guardianes-le guiñó el ojo a la mujer que estaba al lado de Dagon, cosa que el último notó

-Podría quedarme aquí y acabar con todos ustedes, demonios de segunda, pero tengo trabajo que hacer...así que solo haré esto...-levantó su puño y Dagon empezó a vomitar sangre descontroladamente-Adiós Dagon

-UUUGGGHH-intentó hablar pero fue inútil, su boca estaba llena de sangre y ahora también su barbilla. Gabriel se desapareció frente a sus ojos

-¿Como...pu..pudo haber pasado... esto?-tartamudeó la mujer mientras Dagon se levantaba dificultosamente

-No lo se...-se acercó a ella mirándola fríamente. Esta se estremeció-supongo que tenemos un infiltrado en el grupo-sacó un pañuelo de su chaqueta y desvió a la mujer. Respiró aliviada

-Su...supongo-siguió tartamudeando y fingió una sonrisa mientras Dagon se limpiaba la sangre con el pañuelo

-Oh, y Janeth-llamó a la mujer

-¿Mi señor?-respondió ella. Dagon guardó su pañuelo para sacar su daga y giró rápidamente hacia ella para apuñalarla en el pecho-agh.....Como...lo-comenzó a brillar en rojo y luego cayó

-Para perras como tu hasta el infierno es muy bueno-sacó la daga de su pecho y luego aliño su chaqueta para marcharse acompañado de Daniel, uno de sus fieles servidores.

Luego de eso Dagon formó una escuadra de demonios y les ordenó buscar a Gabriel para capturarlo de nuevo. Tenerlo ahí, puede ser una ventaja en cualquier momento.