-¡Matalo Violeta! ¡Matalo antes de que él te mate! - Me dijo mi subconsciente.
Yo ya estaba demasiado involucrada para huir de esta situación, era cuestión de matar o morir. Mis manos temblaban, mi voz se hacia más chiquita de lo usual, mi respiración se volvió forzosa, mi corazón latía demasiado rápido yo ya no sabía que hacer, mi brazo sangraba demasiado, por mis ojos corría la sangre de mi herida en la cabeza.
-¿Por qué haces esto Violeta? Yo realmente te amaba. -Dijo Gabriel mientras se apoyaba de la pared para no caer.
-Lo siento, lo tengo que hacer para ser libre. No puedo llevarte conmigo, tengo que matarte para avanzar. -Dije, mientras lágrimas acariciaban mis mejillas.
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Son la 6:00 a.m. hoy es mi primer día de clase en la universidad. Mi nombre es Violeta Pulido, tengo 18, soy estudiante de criminología.
-Hola.. ¿Lista para tu primer día? -pregunto mi madre con una sonrisa de oreja a oreja.
-Por supuesto, estoy emocionada. -Dije mientras me servía café.
-Un nuevo comienzo, ciudad nueva, escuela nueva, vida nueva. Violeta, disfruta este nuevo comienzo, el Dr. Suspendió tus medicamentos, dentro de poco podrás dejar de asistir con el Psiquiatra Martín. -Dijo con una cara de preocupación.
-Tranquila, ma. No volverá a suceder esto, ahora tendré nuevos amigos y será asombroso. Adiós, te dejó, sino llegaré tarde a mi primer día, te amo.
-Adiós, cuidate, te amo más y suerte. -Me dijo mientras acariciaba mi cabeza.
Vaya, esto es asombroso. La universidad es más grande de lo que esperaba, esperó no perderme.
-Buen día, ¿sabe cual es el salón c5? -pregunte a un sujeto pelirrojo.
-ah, hola. Es este, ¿tu también eres estudiante de criminología? -pregunto mientras miraba a unas chicas pasar.
-si. -Respondí fríamente.
-Perfecto, seré tu compañero. Soy Gabriel, desde hoy llamame Senpai. -Dijo mientras me miraba seriamente.
-¿Qué? ¿De que hablas? No entiendo.
-Olvidalo, son cosas que no entenderás y no se me apetece explicarte. ¿Tú nombre cuál es? -pregunto mientras miraba su celular.
-Violeta. -Respondí enojada mientras entraba al salón.
-Hola, mi nombre es Elizabeth. Esperó poder llevarnos bien. ¿Cuál es tu nombre? -Dijo mientras sonreía.
-Soy Violeta, mucho gusto. -Respondí amistosamente.
-Violeta, sientate a lado de mi, seré buena compañera. -Dijo amablemente.
❴Vaya, que linda. No me imaginaba que mi salón tendría a una chica tan linda, su cabellera tan larga y oscura y su piel pálida. Ella me agrada, no como ese imbécil de Gabriel.❵
-Buen día, seré su profesor y asesor. Soy Marco Sabido.
