Muchos animales desde siempre han sido parte de los rituales y misas negras, de adoración al diablo, sacrificios de gallinas, gatos negros, perros y zopilotes entre otros, han hecho de éstos un misterio en torno al porqué hubo una época durante la cual se asociaban gatos negros al lugar donde vivían las señoras que practicaban la brujería y hasta hoy en día nos persigue esa superstición.
En todo el mundo hay narraciones de personas quienes aseguran haber visto fantasmas de animales ya muertos, se han visto flotar perros, gatos y cabras, caballos con ojos brillantes como llamaradas que atacan a quien se les pone enfrente, sin embargo, hay otras narraciones que preocupan más por los resultados o mejor dicho las desgracias de su aparición.
Una de estas se desarrolló en la Sierra de Michoacán, donde la señora Guadalupe 'N' había tenido algunos problemas. Después de que todo se solucionó, tenía mucha ropa sucia, y una tarde decidió ir a lavar al río el cual está a 2 kilómetros del pueblo, solo que para llegar a él hay que transitar por veredas de difícil acceso; pues bien, como era bastante lo que tenía que lavar, se le hizo de noche y se acompañó de una vecina.
Las dos venían cargando su tambache de prendas al tiempo que platicaban, más o menos a la mitad del camino, súbitamente apareció un animal frente a ellas, no se le vía forma definida, si era gato o perro, pero poco a poco fue creciendo y al final tenía el tamaño de un caballo, aunque no tenía esa forma. Era como un bulto, se les fue encima atacando a la señora Guadalupe, su amiga, después de aventar su tambo con ropa, huyó gritando rumbo al pueblo; al llegar a éste dio aviso a su esposo y al de la señora Guadalupe, reunieron a más personas y fueron a auxiliarla donde habían sido atacadas, encontraron a Guadalupe tirada en el piso, pero no tenía rasgos de sangre por fortuna.
La cargaron y llevaron a su casa, tenía moretones en todo el cuerpo, pero como si una plancha le hubiera caído encima. Los siguientes días tuvo pesadillas y sufría con ellas, la boca se le fue de lado y una pierna no la podía mover, pasaron dos años y no cesaban las pesadillas ni la enfermedad, que venía acompañada por una insuficiencia para respirar, pero aun así realizaba todas sus actividades sin dificultad. Al narrar lo que le había sucedido, muchos lugareños contaron otras experiencias del mismo animal y que había intentado atacarlos.
En la mayoría de los pueblos existe la creencia de que, a este animal, que aseguran que es el diablo transformado, se le ahuyenta diciéndole groserías.
Un hecho singular es que usted verá siempre la representación del diablo como la figura de un hombre fuerte con cuernos y patas de cabra, y una cola como la de los dinosaurios. A este personaje siempre se le ha asociado con el color rojo, representando la sangre que se derrama por sus maldades, sin embargo, la mayoría de las veces se le asocia con algún animal.
La leyenda del Nahual es muy común en toda la provincia mexicana, así como en Centroamérica, no obstante, hay pueblos en que le conocen de otra forma; pero las desgracias y el temor que ocasiona son similares en todo, una de las tareas en el futuro cercano es rescatar todas esas leyendas o narraciones de las personas, para comprender mejor lo que es o de qué se tratan las manifestaciones que la gente de campo ha llamado Nahual.
Yo sabía que el nahual era como un brujo que se transformaba en animal; según las culturas de los indios americanos eran chamanes que obtenían poderes de la naturaleza y podían convertirse en su animal protector, y que para lograrlo bastaba con buscar al animal y matarlo, comer y beber lo que ellos comían y bebían y al fin cubrirse con su sangre y curtir su piel. De esta manera obtenían sus poderes, pero era un ritual demasiado peligroso.
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Creepypastas,Leyendas Urbanas,Relatos
RandomEsta es la segunda parte de mi libro "juegos,invocacciones,creepypastas" Y espero que igual les guste mucho como el anterior