Era el día.
Definitivamente era el día, mi día.
El vestido era, es el indicado, yo lo sabía y Kat lo sabía.
De no ser por eso ya habría armado todo un alboroto sobre que estaba mal, aunque a estas horas ya no habría nada que podamos hacer.
Estaba a instantes de salir por esa puerta y ser la prometida de Armando.
Confieso que todo su plan se vio arruinado cuando la bocazas de Kat llego diciendo que lo vio comprando el anillo en una de las mas caras joyerias de la ciudad. En ese momento quedé en shock, no sabía hacer solo me quedé ahí, con mi mejor amiga hablando de lo feliz que estaba por mi.
Ambas sabíamos cuanto había esperado por esto, un año en realidad, un maldito año lleno de ilusión, de esperanza de que al fin llegara este día, en el que pasaré de ser solo la novia a la prometida.No es mucho, pero es un gran paso.
-¿Estas lista, Ham?- lo vi por el reflejo, solo asentí. La emoción no me dejo hablar sin sentir las ganas de llorar.- Te ves preciosa.
-Gracias, tu tampoco estas nada mal, ¿iremos a algún lugar en especial?
-No, solo iremos por ahí.
Auch
La cara de indignación de Kat fue épica, sin embargo no dijo nada al igual que yo. No podía culparlo el no sabía que yo sabía. Era un poco estresante no poder gritar un enorme SI.
Pero la espera iba a valer la pena. Yo lo sabía, Kat lo sabía.
***
Solíamos jugarnos bromas por eso cuando llegamos al restaurant lo único que me repetia era que en algún momento el me diría ¡es broma, Ham, ríete!, y yo como la excelente novia que soy me solitaria a reír, por la espantosa broma, que me estaba aplicando, lo malo es que para mi no era momento de bromas, estábamos por comprometernos, por dios santo.-¿No esta genial el lugar?- me da su más hermosa sonrisa- lo descubrí un día que vine con los chicos a tomar unos tragos... Pero bueno no venimos a hablar de eso, en realidad tengo algo muy importante que decirte.
Sentí la emoción subir por mis venas, aunque creí que primero íbamos a comer, tengo hambre aunque no me importaría posponer la comida solo un poco.
>> Pero mejor primero vamos a comer, estoy hambriento.
Vaya, no soy la única
-Me parece excelente tu idea, no pude comer nada en el día, con todo lo que estuve revisando, quedé hambrienta.
-¿Tuviste muchos clientes?.
-Para nada, solo no quería dejar cosas pendientes.
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El gris también es un color
RomanceCuando crees tenerlo todo, ahí es cuando te das cuenta lo real que es tu vida.