Mi vida

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Nací, como todo ser vivo debió, sin problemas. Tenía un hogar fijo y exclusivo para mí y mis hermanitos. La leche materna de mi mami era muy calientita y dulce. La amo mucho.

Meses despues, mi madre desaparece y a mis hermanitos los veo muy poco. Estoy incómoda en este mundo de humanos y grandes máquinas.

Me siento muy sola, y estoy muy flaca. No tengo que comer ni donde dormir. Por las noches me da frío y a veces me da calor, necesito un hogar para recibir el amor que mi mamá le faltó darme.

Un día estaba muy hambrienta. Me dolía el estómago. Mis ganas de llorar fueron inevitables. Maullé y maullé y talvez con suerte regrese mi mamá a darme de comer y seré feliz otra vez. No paré de maullar, tenía la esperanza de que al menos un humano llegara y me diera algo para comer.

Salió un señor de su casa. Hizo unos gestos que no entiendo y llamó a una mujer. Talvez era su pareja. Estaba muy feliz, me alimentarán. Fui corriendo hacia ellos y les intenté hacer saber que estaba hambrienta. Como no me escuchaban maullé mas fuerte.

Acaricié las piernas del señor.

Y el me pateó muy fuerte.

Me dolía mucho mucho. Lloré mucho.

Mis maullidos no dejaban de salir por mi corazón destrozado. Me dolía tanto el golpe que perdí mi ojo.

Pensé que iría a crecer de nuevo, pero no lo hizo.

Perdí a mi mami, a mis hermanitos y ahora mi ojo. Estoy muy triste.

Un día un viejo hombre me encontró muy hambrienta, pero en vez de golpearme, me alimentó. Su hijo me tomó una fotografía y se la envió a alguien que no pude reconocer. Estaba feliz.

Pasaron los días y el señor y su hijo me alimentaban, me daban arroz y atún ¡Era delicioso! Un día me metieron en una caja. Estaba muy asustada, no tenia idea de lo que pasaba. Cuando la abrieron, estaba en una casa diferente.

Sali de la caja y exploré el nuevo lugar. Me metí debajo de las tuberias, me eché en las escaleras ¡Hize muchas cosas!

Pasaron unas horas y escuché que abrian la puerta. Escuché la voz de una niña ¿Será una nueva mami?
Al encontrarme acostada en la cocina me alzó con sus manos tibias y me abrazó dulcemente.

Era mi hogar.

Mi felicidad era enorme.

Pasaban los dias, semanas y yo estaba muy feliz. Salia a jugar y mi mami me llamaba para comer. Comía y salia a jugar de nuevo. Incluso me operaron para que no tuviera hijitos. Cuando lo hicieron me sentia boba, vacilaba de un lado a otro y me dormia en mi paso. Ese dia que regresé a casa, no sabia lo que pasaba. Mami me dio un besito y se fue.

No regresó.

El hijo de aquel señor que me alimentaba me tomó y me llevó a mi antigua casita. Estaba muy triste. No tenia idea de lo que pasó. Mi tristeza llenaba todo mi corazón. No queria seguir viviendo... aqui con ellos, queria estar en el calor de mami. Me puse gordita.

Un día salí a jugar porque estaba muy triste. Extrañaba mucho a mi mamá.

Pero la máquina grande venía hacia mi, no la pude ver bien, solo vi la luz de sus lámparas que me deja ciega.

Y yo sólo sentí el impacto de él contra mi cuerpo.

Luna©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora