Dance Academy (1D & tú)

Capítulo 1: Aprendiendo a volar.

Cuando era pequeño, no tenía muy claro ese asunto de la gravedad... Y mi imaginación me metió en muchos problemas... Pero en un momento el tiempo se detuvo... Y todo adquirió sentido... Entonces a los 5 años salté del granero y me rompí la muñeca, pero en ese día supe que en otra vida podría volar, por eso en esta vida bailo...

-____ - gritó mi padre desde la camioneta mientras acarreaba a las ovejas, una vez mas me perdí en mi propio mundo bailando.

-Lo siento - dije apurado abriendo la cerca, pues era ese mi trabajo.

-La tía Beth llamó... Parece que llegó el correo - dijo él con una pequeña sonrisa confidente fingiendo desinterés - ¡Ve! - dijo al ver mi expresión y que no me movía.

Salí corriendo con felicidad, subí a la cuatrimoto que teníamos en la granja y fui a casa a toda velocidad. Ahora mismo en la camioneta del correo hay una carta que podría cambiar mi vida, porque yo no solo bailo, quiero ser un gran bailarín, y hace tres semanas audicioné para la mejor academia del país... La academia nacional de danza, era MI AÑO, mi única oportunidad... Y creía estar listo para todo, pero estaba muuuy equivocado...

-FLASHBACK-

Me encontraba entrando en la Academia, solo perdido, pero con la mas grande sonrisa del mundo. Veía a un montón de chicos y chicas calentando, con sus zapatillas de punta, leotardos, mallas, necesitaba encontrar los vestidores pronto. Entonces oí un ruido no tan alejado a mí.

-¿Te crees muy graciosa, no? Voy a borrar esa sonrisa de tu... - decía un chico rubio, de ojos azules y una sonrisa encantadora con brackets, golpeando una máquina expendedora antes de que lo interrumpiera.

-Eh... Oye disculpa... ¿Sabes dónde están los vestidores? - dije amablemente, aunque algo tímido.

-Oh, déjame ver - dijo tomando un croquis que me habían dado cuando solicite información - claro, vas derecho por ese corredor, gira a la izquierda y es la... Segunda puerta a la izquierda - dijo él pensando, para luego sonreír, tenía puestas sus mallas y una camiseta blanca, tal como es el uniforme de chicos.

-Gracias - dije feliz, dando vuelta y partiendo de ahí.

-Por nada... - dijo él sonriendo para luego voltearse y patear una vez más la máquina expendedora.

Fui lo más rápido que pude hasta los vestidores, entré y comencé a desvestirme, cuando una chica entró y se me quedó viendo.

-Guau... No te distraigas por mí - dijo ella con naturalidad, era alta, blanca, muy delgada, rubia.

-¿Qué haces aquí? ¿Por qué entras en el vestidor de los chicos? - dije molesto cubriendo mi... Bueno... Desnudez.

-Eh... Creo que ese que está ahí es un brassier, a menos que tengas pechos - dijo ella señalando un brassier que estaba sobre una de las bancas.

-Oh, genial... - dije algo molesto, para luego salir y luego luego saliendo chocar con un chico, alto con pestañas súper largas y rizadas, hermosos ojos cafés, cabello negro, parecía tener algunos rasgos del Medio Oriente, pero parecía todo un príncipe... Él al ver que yo salía del vestidor de las chicas solo rió un poco y comenzó a caminar - oye, no pienses mal, eso no fue nada, o sea, obviamente sí fue algo pero... - decía yo nervioso.

-Tranquilo, no te juzgo - dijo él con una sonrisa acariciando suavemente mi brazo para despreocuparme.

-Please, ¿podrías llevarme al vestidor de los chicos? - dije.

-Claro, ¿vas a audicionar? - dijo él comenzando a caminar - Soy Zayn... Malik, por cierto.

-¿Tanto se me nota? - dije.