1-Vida Cotidiana

50 3 0
                                    


Ya lo había visto pasar algunas veces... bueno "algunas" es muy vago. Para ser exacta lo había visto dos veces. La primera vez yo iba saliendo de la cafetería, él iba entrando.

La puerta giratoria proporcionó nuestro fugaz y primer encuentro, mis ojos se clavaron en los suyos por algunos segundos, y cada uno siguió su camino.

Después de ese momento camine a casa pensando en el chico de la sonrisa perfecta y los ojos verde esmeralda. Los pocos segundos de nuestro encuentro fueron suficientes para recordar cada detalle de su mirada... calma, pacífica y profunda.

-Despierta.... Despierta... - dice una voz de fondo-

En ese preciso momento me doy cuenta de que todo había sido un sueño, un absurdo sueño. Vuelve a comenzar un día como cualquier otro: universidad, trabajo, casa, universidad, trabajo, casa...

Mi canción favorita empezó a sonar, cada segundo se hacía más fuerte hasta que sentí que mis oídos explotarían, o más bien hasta que logre despertarme. Pensé
que al poner mi canción favorita como tono de despertador me haría despertar con una actitud positiva y con ánimos de un nuevo inicio de semana.

Lamentablemente al ver el teléfono me di cuenta de que ya era demasiado tarde, eran casi las 7:00 am, pero mis ganas de quedarme en cama eran más grandes que mi voluntad para ir a la universidad y era una pena ya que era el último día de clase, pero justo antes de quedarme dormida otra vez, escuche la voz de mi madre entrando a mi habitación.

-¿Has visto la hora? Tessa llegarás tarde otra vez, arréglate rápido!- salió azotando la puerta-

Suena el teléfono, está lejos, muy lejos.

-¡Te está sonando el teléfono Tessa! - me dice mi madre-

Parece que cada vez que me suena el teléfono mi madre se emociona. En verdad si que se emociona, no le importa quien haya detrás del teléfono, lo que importa es que estoy hablando con alguien y punto.

-Lo sé mama...

Aprendiendo a vivirDonde viven las historias. Descúbrelo ahora