Lucy, the Vampire [Pausada]

Capítulo 22

El resto del camino lo hicimos en silencio, lo único que se oía en el auto era mi respiración agitada, su aroma me está volviendo loca, necesito beber de él, pero no debo hacerlo. Siento el latir de su corazón, es el sonido más hermoso que he escuchado en la vida.

-Lucy, cálmate...- Me pidió Alexander- El latir de tu corazón me está volviendo loco, no sabes las ganas que tengo de morderte...

-Lo siento, pero tu aroma es mi perdición.

-Si no nos alejamos en los próximos 5 minutos aquí habrá una guerra...- Reí ante su comentario, es cierto que si dos vampiros se quieren morder se genera una guerra para ver quien muerde primero, pero es gracioso escuchar eso salir de sus labios.

En menos de 5 minutos llegamos a mi casa, lo que en cierto modo es muy bueno, ya que no puedo aguantar más respirar de su aroma. Alexander detuvo el automóvil, bese su mejilla y salí corriendo en dirección a mi casa. Sé que Alex debe estar riendo como un loco ante mi comportamiento, pero necesito sangre ahora mismo, no quiero morderlo.

Al entrar en casa pude escuchar voces desde el salón de fiestas. Camine hasta allí para ver quiénes eran, pero para mi desgracia eran mi madre y los padres de Oliver, quienes al verme sonrieron, pero mi madre, como siempre que me ve, frunció el ceño.

-Hola querida, tanto tiempo, ¿Cómo has estado?- Habló la madre de Oliver.

-Hola... He estado muy bien ¿Y ustedes?- Respondí.

-Lucy, no mientas, sabemos que has estado muy deprimida por la separación con nuestro hijo- Esta vez fue el padre de Oliver.

-Con todo respeto señor, su hijo no me interesa, no estoy interesada en cobardes- Respondí cortante.

-Vaya...- Dijo riendo la madre de Oliver- No soy la única que cree eso de Oliver.

-Señora, se supone que las madres deben querer a sus hijos y enseñarles de sus errores, no sacárselos en cara- Dije muchísimo más fría que antes- Con su permiso, tengo cosas que hacer- Dicho esto salí de la habitación y me dirigí a mi cuarto.

No puedo creer que el Marqués Redford crea que aun me gusta su hijo después de 10 meses, y tampoco puedo creer que la señora Redford piense que su hijo es un cobarde, ¿Acaso todas las madres piensan mal de sus hijos o solo las madres que me rodean a mi?

El sonido de un mensaje me hizo salir de mis pensamientos, así que tome mi celular y me senté junto a la ventana a leer el mensaje.

Alex: Lucy, he bebido más de 10 botellas de sangre y sigo hambriento... No sé qué hacer (9:16 P.M)

"Como me gustaría darle mi sangre en este momento"

Lucy: Leí que cuando eso pasa solo la sangre de la persona que amas puede quitar la sed" (9:18 P.M)

No es como si le estuviese mintiendo, realmente leí eso en libros.

Alex: Me darías tu sangre?? (9:19 P.M)

Lucy: Claro, te lo debo por morderte el otro día... (9:20 P.M)

Alex: Te llevaré al instituto mañana... Pasaré por ti a las 7:15 (9:20 P.M)

Lucy: Esta bien... Buenas noches, hasta mañana (9:21 P.M)

Espere un par de minutos una respuesta que nunca llegó. Al darme cuenta que no respondería busque mis cosas para el día siguiente. En mi maleta de deportes pude mi estuche de maquillaje, unos zapatos de tacón negros, y artículos de aseo personal.