Koangel♡Heart

♡Quería darte las gracias♡

Sostuve el paquete despacito entre mis manos.
- ¿Dónde podrá estar, Sakura -chan?

Llevaba toda la mañana buscándole, pero no aparecía por ningún lado.

- Tal vez... podría estar en la biblioteca... - bajé la mirada- Pero ni siquiera sé dónde está eso... - suspiré.

- Aoi-chan... - mi vista se perdió entre los arboles- Esta academia es tan pero tan enorme... ni siquiera sé cual es tu clase...-.
A pesar de que sabía que estábamos en el mismo piso, en ninguna de las mucha salas la había visto...
- Aoi-chan...-.

La campana sonó, anunciado el fin de la hora de almuerzo.

Caminé con tristeza hasta mi aula.

~♡~

Había sido la noche recién pasada.
Una de las puertas de las habitaciones residenciales se había abierto, y alguien salió dirigiéndose a la cocina de aquel piso. No había nadie más, porque ya era tarde.

La chica depositó sobre la mesa, las bolsas con su recientes compras y una cajita. Sacó de allí un paquete de harina, azúcar, tintes de comida, manteca, vainilla.

De la caja sacó su delantal preferido, con vuelitos y un corazón en el borde. Junto a él, sus demás utensilios de cocina.

Cernió la harina con mucha delicadeza, cuidando no derramar ni un poco. Mezcló la manteca con el azúcar, y le agregó vainilla.

Aquello era su especialidad: galletitas.

Le encantaban tanto comerlas, como hacerlas. Sobretodo si eran para alguien más.
Era una de sus maneras preferidas de demostrar sus sentimientos.

Cuando una amiga estaba triste, para poder animarla; cuando simplemente quería demostrarle a alguien cuanto le quería. Para agradecer...

Ponía en ellas todo su corazón, sin dejar de pensar ni un momento en quien las recibiría...

Sobretodo aquellas. Aunque ni siquiera notó... que las preparaba con incluso más amor y dedicación que las demás.

Una vez acabadas, las puso suavemente en un envoltorio con detalles de flores. Sujetó las puntitas y lo ató con un delgado lacito rosa; el color que más adoraba en el mundo.

- Espero que le guste- dijo sonriéndole a su conejita de felpa sobre una silla.

En ese momento se dejó llevar por un dulce latido. Sujetó el paquete, atrayéndolo a su pecho.
Con una sonrisa en su rostro.

- Aoi-chan... - se le escapó de los labios.

~♡~

-¿La biblioteca?
- Sí...
- ¿No has podido encontrarla...?
- Es...es que... la última vez, acabé en el aula de música...
- susurré apenada.
- Ya veo - me sonrió Nako-chan- Yo te llevaré hasta allí.
- ¡¿De verdad?!♡ ¡Muchas gracias!

"Nako-chan es realmente muy amable♡" dije dentro de mí.
Ahora por fin podría encontrar a Aoi-chan.

Depronto me sentí muy feliz de tan solo pensar en verle.

- ¿ Y por qué quieres ir a la biblioteca?
Su pregunta me tomó por sorpresa.

- Etto... estoy buscando a una amiga - dije mirando el paquete entre mis manos - Quisiera poder entregarle algo...

Me vio de reojo, hasta dar con lo que sostenía cerca de mi pecho.

- ¿Es eso de allí?
- S-sí...
- ¿Y lo hiciste tu, verdad?
- ¿Eh...?¿ Co...cómo lo supiste?
- Se ve a lo lejos - rió.