FIRST

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First

Esa noche seria la mejor de todas sus fiestas, joder, hoy estaría más ebria que nunca.

Ella, Katie Richter, era una de las más solicitadas en las fiestas por varias razones: convivía con cada uno de su estúpida escuela, tenía un gran sentido del humor y poner el ambiente.

Y vaya que eso eran las ligas mayores, Katie aún empezaba y a menos de mitad de año era más conocida que los alumnos viejos de University Bouth.Era una chica bastante sociable, hablaba con todos sin excepción. Para ella no había distinción.

-¡Hey Katie, viniste!-gritó Cody por encima de la música.Ese chico era una de los más calificados para follar.

-Si, lo hice.-dije y ambos reímos.-Vaya, tus fiestas nunca dejan de sorprender.

-Oh, y espera a que vengan los autos de carreras.-Si, Cody era hijo de papi.Una por las razones que Katie no le atraía aun que no fuese un mal partido.

-¿Enserio? -Cody asintió y me tendió una bebida roja -Gracias.

-Tequila con sangría.Es deliciosa.-Cody me miro de arriba hacia abajo, pero no le preste atención y seguí sonriendo -Oye Katie...

-¡Cody! -lo llamaron desde el patio de la casa. -¡Las putas ya llegaron! -Cody negó con la cabeza y grito "Ya voy".

-Vete, yo iré por allá.-dije mientras me daba la media vuela dejando a Cody con al palabra.

-¡Katie! Dios, sabía que vendrías, será genial. Las fiestas no son igual sin ti.-dijo Rosse, una chica del equipo de fútbol americano.

-Gracias Rosse.No bebas tanto -Rosse se río como si hubiese dicho algo gracioso.

Ya lo estaba.

-Katie, linda, ¿que dices si vamos por un...? -Ryan, un chico de mi clase de inglés.

-Buttler, no te acerques a Katie -Los chicos de hockey tenían una rara costumbre de 'protegerme' solo por ser su tutora de biología.-¿Te molesta Katie? -pregunto John dirijiendo se a mi con una mirada dulce.
El era un amor, pero cuando se enojaba, era mejor correr.

-No John, tranquilo -sonreí dulcemente hacia el mientras que frotaba su musculoso brazo derecho.

Dios.

-Si, grandote, ya la oíste.

-Sabes John... -volví la mirada hacia Ryan y ladee mi cabeza.-¿por que no le enseñas a Ryan a cerrar la boca?

John asintió más que complacido por hacerlo y sostuvo a Ryan por los hombros, llevándoselo.-¡Lo quiero vivo chicos!

Katie era la chica perfecta para un hombre, era: carismática, linda, lista, simpática y lo que todos quieren... "buen cuerpo".

Pero ella no lo veía así, no. Ella sentía que no valía nada.

Su madre solía drogarse en las calles hasta que se la llevaron;pero eso no le perjudicó a ella por que, en realidad, a ella no le importaba su madre.

Pero no todo era malo en su familia, ¡por su puesto que no!

Tenía a su padre, en el ejército, pero lo tenía.Nunca tuvo una figura a seguir... sólo tenía a su hermana mayor: Cory, una chica de veintinueve años, pésima para el ejemplo de figura a seguir.

Mientras caminaba sumergida en mi mierda, caí en cuenta que me había alejado bastante de la casa de Cody.

«Estúpida» pensé.

BloodlessDonde viven las historias. Descúbrelo ahora