Buscando las Alas de la Libertad #1| Shingeki no Kyojin Fanfic ©

Capítulo 13: "La batalla de Trost".

[Editado]

Capítulo 13| La batalla de Trost.|

Le costaba respirar. Sentía algo caliente por todo su rostro y un dolor horrible en la cabeza. La superficie donde estaba recostada era fría y dura, lo que le provocaba un horrible dolor de espalda. Quería abrir sus ojos, quería saber dónde se encontraba, pero no podía.

Sentía como la sacudían y llamaban a gritos, pero no quería ni podía despertar. ¿Acaso estaba dormida? ¿O podría ser que estaba muerta? Ni ella misma sabía lo que sucedía. Lo último que recordaba era una mano enorme arrastrarse hacia ella y luego cayó de gran altura.

–¡Laura, Laura!

En su estado de inconciencia, le era imposible reconocer una de todas las voces que la llamaban. Lo único que sentía eran jalones en sus brazos, alguien sacudiéndola de los hombros y otra persona tomando su mano, pero era incapaz de mover músculo alguno.

De repente se vio a sí misma en un lugar con obscuridad total. Todo era negro. No podía diferenciar el suelo del techo (si es que estaba en una habitación). Estaba un poco asustada, pues la obscuridad y ella no eran muy buenas amigas.

–Me hubiera gustado muchísimo que te unieras a las Tropas Estacionarias. –escuchó una voz femenina que parecía estar hablando sola–. La Legión es un poco peligrosa, ¿no prefieres ayudar en la panadería de nuestros padres?

Comenzó a mirar hacia todas partes y fue cuando la vio. Era una figura femenina, aunque más bien parecía una simple luz blanca que se alejaba.

–Despierta, querida Laura –le dijo nuevamente la voz, sonaba desesperada–. Tus amigos te necesitan...

El chorro de agua helada que Conny lanzó sobre su rostro la hiso abrir lentamente los ojos. Estaba recostada en el suelo del almacén de provisiones, con Conny, Sasha y Armin junto a ella.

–¿Qué ha pasado? –Preguntó, luego llevó una mano a su frente y se espantó al ver su palma manchada con sangre–. ¡¿Qué tengo en la cabeza?!

Ellos se miraron entre sí y suspiraron. El primero en hablar fue Armin–: El titán colosal destruyó la muralla de Trost... –dijo–. Tú estabas ayudando con la limpieza de los cañones, por lo que fuiste una de las primeras en caer. Para tu suerte, uno de los chicos logró atraparte y solo te diste un golpe con el tejado de una casa, por eso tienes esa herida. Ahora debemos ir a evacuar a las personas, por eso te necesitamos.

Asintió. Ahora todo tenía sentido. La mano enorme, la sangre en su cabeza, la caída. Ese maldito había vuelto y ella no había podido siquiera enfrentarlo. Antes de que alguno de ellos pudiera decir algo más, Laura se levantó rápidamente del suelo y miró hacia todas partes preocupada.

–¡¿Dónde está Marco?! ¿Él está bien, verdad?

–Sí, no te preocupes –Conny sonrió, lo que hiso que Laura se calmara un poco–. En este momento debe estar con Jean cargando gas.

–Bien, gracias, Conny. Por favor, avísenle que estoy bien... ¡Diablos, es verdad! Iré a la enfermería rápido, debo verificar que todo en mí esté bien, ¿sí?

[...]

Salió de la habitación en estado de shock. ¿Era cierto lo que acababan de decirle? ¿En verdad ella...? Sonrió inconscientemente y pasó una mano por su cabello. Era hora. Debía ir a hablar con Marco.

Corrió por toda el almacén hasta encontrarlos a él y Jean preparando sus equipos de maniobras. Ella tenía todo listo, estaba preparada para su primera batalla cara a cara con titanes reales.