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Su nombre era Nase Shion, pero a Shinya le gustaba llamarla Shio-chan. Su llegada al escuadrón Guren había sido repentino, de hecho seguia siendo un misterio su origen. Su padre adoptivo la habia manteniendo resguardada.

Estaba seguro de que esa mujer era de un alto nivel, su arma demoníaca era preciosa, un arco más sorprendente y certero que el de Yoichi. Desde el momento en que la vio añ igual que Guren, supo que sería un problema.

-¿En verdad estás de acuerdo con que se una a tu escuadrón?

Preguntó por tercera vez Shinya a Guren.

-Ya te dije que me da igual- respondió el teniente coronel con cansancio a su amigo- No molestes.

Shinya esbozó una gran sonrisa perversa a su amigo y achicó los ojos.

-¿No será que te gusta? Es por eso que no chistaste. Hmpt, Teniente Coronel, que perverso.

El rostro de Guren se vio ruborizado y luego golpeó a su amigo en la cabeza.

-Parece que. Quien le gusta es a otro -se burló.
-No bateo para ese lado en este momento -Frunció el ceño el ojo-azul y luego caminó por la oficina de Guren.
-Ya lo veremos. -El rostro de Guren se oscurecio. Un gritó resonó fuera de la oficina, proveniente del baño de mujeres. Guren rodó los ojos ante la cara perversa de su amigo, de nuevo había molestado a una de las chicas

¿Es que Shinya nunca maduraria?

Las puertas se abrieron de golpe dejando ver a una Shion agitada y con el cabello mojado, iba con una toalla morada enredada al cuerpo desnudo, pero habia algo fuera de lo común. Su cabello que normalmente era azul verdoso estaba un poco oscuro, como azul rey. Guren había ahogado una carcajada, con que de eso se trataba, pintura en el shampoo.

-No creí que fuera el de ella...
Escuchó susurrar a Shinya.

-¡Higari! -Le gritó añ de pelo plateado.- Espero que vayas preparando a tu hermoso trasero para una buena golpiza, cabronazo. -Gruñó la joven mujer. El rostro de Shinya se enrojecio.

-¿M-mi trasero es hermoso? -preguntó. Guren soltó una carcajada desde donde estaba sentado detras de su escritorio y llevó sus manos detrás de la nuca poniéndose cómodo para ver el show.

Shion apretó los puños y se acercó rápidamente al ojo-azul finteandolo con un puñetazo directo a la mandíbula, pero como era de esperar él lo esquivó dejando su retaguardia despejada para que Nase pudiera patear su bonito trasero mandandolo de bruces contra el suelo.

El delicado rostro del Higari retachó contra el suelo, la carcajada de Guren estalló, esa chica era tremendamente fuerte. Deseó haber fotografiado el momento para vengarse de su amigo.

-Auch. -se quejó el joven fe cabello plateado, Nase se acercó hasta donde el bromista se encontraba.
-¡Que sea la última vez que tocas mi cabello, Higari! ¿Entendido? -Le gritó.
-Sí, señora -contestó de inmediato y estiró su mano agarrando la toalla de la chica para poder levantarse del suelo pero esta se vino abajo dejándola casi ddesnuda. Guren desde atrás pudo verle todo. El rostro de Shion palideceo y luego pasó a ser sinilar a un tomate.

Shinya se quedó perplejo y sintío un liquido escurrir de su nariz. Bella era.

-¡Idiota pervertido! -lo abofeteó, se enredó la toalla y salió huyendo del lugar.

Las risas de Guren trajeron al ojo-azul de vuelta a la realidad.

-Aun viendo todo eso ¿Sigue sin gustarte?
-Definitivamente, Guren -sacudió la cabeza y luego miró a su amigo con picardía- A mi sólo me gustas tu, Guren -y se lanzó contra él. Así era Shinya antes de Shion.

Lion Heart | Shinya HiragiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora