Desicion Inquietante

Capitulo 1

Esta historia será narrada en primera persona. Van a variar los personajes. Aveces narrará Mary y aveces Maxon. Pero se darán cuenta al momento y si en un capítulo narraran los dos les colocaré el nombre del Narrador.
Disfruten!!

Hola! Permitan-me presentarme, soy Mary Black y tengo 18 años. Les cuento que me siento una persona nueva, quizás es la emoción por pasar la siguiente etapa, si! Pienso entrar a la universidad de Berkeley, California en la que iré a estudiar Letras. Y siento que al fin pude librarme de la secundaria y empezar algo serio que dará rumbo a mi esperado y anhelado sueño de ser escritora. Les daré un resumen de mi vida, siempre fui una chica muy aplicada en los estudios, aunque para mi la primaria y secundaria es lo mas sencillo. Vivo con mi padre que me adoptó a los 2 años y con Maxon, mi ¿hermanastro se podría decir? El también fue adoptado por papá cuando el tenía 10 años. Para mi es solo Maxon un chico mas en mi hogar, porque no nos tratamos como hermanos pero tampoco como desconocidos. No se lo que somos... En fin, vivo en Los Ángeles, California. Me gustan todos los colores menos el naranja, el negro no puede faltar. Odio las matemáticas, ¿quién no odia las matemáticas? haha.
Amo escribir, aunque eso ya lo mencioné. Amo a mi padre, le considero a mi única familia cercana, me educó para ser una mujer fuerte e independiente y gracias a él no me falta nada. Okey, dejare esto por aquí, se me hizo extenso y quizás no sea muy interesante mi vida.. Desearía que mi vida tuviera una pizca de atractivo, o al menos no tan aburrida como suena.

...

̶ Porque no bajas y me ayudas en la cocina cariño -interrumpe mi padre en mi habitación y en intento de tirarle una mirada amenazante para que golpee antes de entrar- lo siento...-dice al notarlo me guiña un ojo y cierra la puerta.

Aveces no entiendo que tan difícil es utilizar los nudillos para golpear la puerta suavemente para llamar la atención antes de entrar como señal de aviso..-en seguida bajo papá- grito al mismo tiempo que cierro mi notebook.

Al bajar las escaleras puedo presenciar lo espaciosa que es la mansión dejándose decorar por cuadros de artistas famosos y uno que otros anónimos. En cada esquina te encontrabas con plantas de todos tamaños y tipos de hojas, según papá hay que mantener un habiente natural y pintoresco.
Bajaba esas escaleras como si no las pisara y solamente volara sobre ellas, me agradaba sentir el mármol liso en mis pies.. ¡Amo andar descalza por la casa! (en realidad es una mansión pero decir "casa" lo hace mas hogareño y simple, no somos millonarios pero papá dirige un internado privado y es uno de los mejores de California y fundó otro internado en Londres quien su mejor amigo dirige)
Después de haber..."volado" por las escaleras y antes de dirigirme a la izquierda donde se encontraba la cocina, me detengo tras escuchar la puerta principal cerrarse por un chico de 1.83 metros de altura, miro su cabello castaño y bajo hasta llegar a sus ojos de un azul intenso mirándome indiferente, como si no fuera algo suficientemente interesante para ver.. a pesar de que esa mirada ya la he visto varias veces y siempre me pregunto que se le cruzará por la mente.. ¡Rayos Mary! Te está mirando, actúa normal y deja de observar de esa manera que sospechara que eres una rara.. hermana? 10 años viviendo juntos y no se lo que somos.

Sin darme cuenta ya estaba subiendo por la escaleras mientras miraba su celular entretenido contestando seguramente un mensaje. Sin mas rodeos me dirijo a la cocina y veo que mi padre me apiló los tomates para preparar la ensalada.

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Ya son las 18:36 pm y me encuentro cómodamente en el sillón de la sala, sentí que la inspiración toco la puerta y tuve que tomar mi cuaderno y lápiz y empezar a escribir mi historia que llevaba unas cuantas hojas ya llenas de palabras, muchas remarcadas varias veces y otras tachadas con varias líneas. Pero de algo no me percaté que hizo que me ahogara un grito y saltara del susto. Maxon respiro por mi nuca y supuse que estaba espiando lo que escribía, juro por mi amado padre que no lo había escuchado venir. Me esfuerzo en tomar un suspiro muy profundo para calmar mi pulso que se había acelerado tras su inútil intento de darme un paro.