Todo me daba vueltas y no podía recordar que había pasado, sólo podía ver el cuerpo de mi madre en el suelo con manchas de sangre esparcidas donde ella se encontraba.
-Lo siento, lo siento. No quería hacerlo. Ella me obligó. Perdóname.
Más no podía hacer nada más. Ya lo había hecho, y no podía creerlo.
Y no era la primera vez que me pasaba.
Niall.
-Estás a cargo de la investigación, Horan.
-Entendido.
Pasaba horas y horas revisando los expedientes de Austin Miller pero por más que leía no comprendía quién sería capaz de matarlo.
Tenía solo 16 años, era un adolescente ejemplar, era muy popular, no entendía el por qué.
-Deja eso un rato. No puedes estar todo el día leyendo eso.
-Si puedo, Danielle. Y no me cansaré hasta saber quién está detrás de todo esto.
Danielle sólo bufó.
No estaba para sus boberías ahora.
Hayley.
-¿Qué hacemos con este cuerpo señorita?
-No lo sé, Arthur. Tíra esos dos cuerpos lejos, ya sabes donde.
-De acuerdo, Miller.
-No quiero que nadie encuentre el cadáver de mi hermano.
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Bad. Niall Horan
Overig-Hayley, por favor, no me hagas esto, perdóname. -¡NO! Me has colmado la puta paciencia. -Te lo recompensare, te lo juro. -No, entiendeme. Tú le diste a la policía mi dirección y ahora tengo que irme cuánto antes. -Si, lo sé. Ellos me obligaron. ...
