Allí estaba ella, haciendo el mejor pole dance que halla visto, quede helado, era castaña con ojos claros y tenía un cuerpo de modelo, me preguntaba que hacía una mujer tan bella como ella en un lugar así.
Estaba hipnotizado, hasta que Steaven me dio un golpe en la espalda.
-Despierta idiota, ahí viene Fibonacci-
No sabía que hacía el señor aquí, en este simple puticlub de tantos en la ciudad, me resultaba difícil mantenerme serio con Fibonacci ya que tenía un extraño acento italiano, pero si no me contenía terminaría sin lengua con la que reír.
-Que tal muchachos, ¿todo bien con las prestaciones? - Dijo Fibonacci.
-Todo excelente jefe!- dijo Steaven nervioso por la presencia del jefe.
-¿Que hace por aquí jefe?- pregunté,
Cuando respondió mi sonrisa por su forma de hablar se borro de mi rostro.
- Los chicos me dijeron que había una chica excepcional por aquí, y parece que tenían razón - estaba hablando de la chica que vimos cuando entramos al club.
Fibonacci hizo una señal, le dijo a la chica que venga y se presentara con el, ella tenía una mirada seria, casi desafiante.
-Cual es tu nombre? - Preguntó el jefe.
-Vanessa - contesto cortante.
Quede inmóvil con su dulce voz, pero Fibonacci también...