18.
Louis recibía la pelota lo más rápido posible y se encargaba de defender el arco con demasiado esfuerzo mientras su novio lo apoyaba desde las gradas.
Cada vez que el rizado tenía un hueco y podía asistir a los entrenamientos de su prometido, lo hacía. Lo hacía porque para él era como perderse los primeros pasos de un niño; no soportaría saber que no estuvo para ver cómo su novio progresaba y le agregaba profesionalismo a su fútbol.
Ésta vez no estaba solo, Phoebe lo acompañaba y los dos incentivaban al castaño desde el público ya que la práctica era abierta.
El entrenamiento se tornó recreativo y mandaron a Louis a calzarse un par de guantes para ir directo al arco.
En realidad era malo.
-¿Cómo van las cosas con Chad? -Preguntó Harry, hace bastante quería saber sobre ese tema pero jamás preguntaba porque Louis siempre estaba cerca y en realidad detestaba a ese chico. Tanto que ni siquiera soportaba su nombre.
El semblante de la joven rubia cambió y el tono de su piel se tornó más pálido de lo común, ya no esbozaba una sonrisa y la mirada azul que le dedicaba al rizado en esos momentos estaba cargada de algún sentimiento que el joven no logró descifrar.
-Bien -dijo en un susurro la menor-. Marchan mejor, supongo.
Evitaba la mirada bella y esmeralda que su cuñado le dedicaba perdiéndose en las atajadas de su hermano.
-¿Hay algo que quieras contarme? -Interrogó el mayor y Phoebe negó zarandeando la cabeza, tocó su hombro para llamar su atención y que le devolviera la mirada y ésta se exaltó, alejándose algunos centímetros del chico-. Lo siento Pheebs, ¿te asusté?
-No. -Respondió en seco para levantarse de los escalones en los que se encontraban observando la práctica-. Iré al sanitario.
Se alejó sin más y el de rizos comenzó a preguntarse qué era lo que había hecho mal pero sin muchas vueltas, sabría que pronto la más pequeña (o tal vez no tanto) se abriría con él para contarle qué era lo que la traía así.
Phoebe desde el primer día que Harry llegó a su hogar, sabía que sería su confidente y compañero en lo que se le presentase. El de la mata de rulos sonrió ante el recuerdo de las tardes interminables de juegos que pasaban los dos junto a Louis cuando ella era sólo una niña.
Se perdió en el recuerdo y pegó un salto cuando sintió las manos de su novio tocándole los hombros. El entrenamiento había terminado y ya era hora de volver a casa.
La feliz pareja caminaba por delante de la joven tomados de las manos y sonriendo como si fueran sólo ellos dos.
Habían optado por caminar para disfrutar el día y compartir más tiempo con Phoebe.
-Ey, Pheebs, ¿recuerdas el chiste de la rana y el gusano que solías hacer cuando eras pequeña? -Preguntó Louis entretenido a lo que su hermana negó-. ¡Vamos, Phoebe! Nunca parabas de hacer ese maldito chiste sin gracia y teníamos que reírnos para que te pongas feliz, ¡cuenta el chiste, vamos!
-Oye, ¿tan poca gracia tenía? Recuerdo haberte visto retorciendote en el piso a causa de la risa. No lo sé, Louis... No parecías fingir.
Harry comenzó a reír por la batalla de los dos hermanos.
-Soy un buen actor, hermanita. Ese es el punto. Ahora cuenta el chiste.
Phoebe no alcanzó a pronunciar una palabra que ya se encontraba desvanecida en el suelo.
Un disparo. Corridas. Ambulancias. Sangre.
Louis golpeaba todo a su paso en la sala de espera del hospital. Phoebe estaba luchando por su vida en terapia intensiva.
-Tranquilo, mi amor, tranquilo. -Intentó Harry pero no hubo caso, estaba seguro de que la bala era para él o incluso para su amado, y terminó impactando sobre su hermana menor.
El castaño comenzó a llorar de la frustración y tomó asiento en el frío piso del lugar. Su amado no tenía idea de cómo afrontar ésta situación y tampoco sabía qué pensar de ésto.
-Todo es mi culpa, siempre arruino todo. Harry, yo no... -Pronunció triste, con enojo y asustado, la voz le temblaba y no podía coordinar las palabras.
Agachó la mirada para encontrarse con la camiseta del equipo que llevaba puesta, bañada en sangre.
La respiración se le dificultaba y no podía hacer más nada que derramar lágrimas. Harry se le acercó para contenerlo en sus brazos pero el mayor lo empujó lejos de él.
-Alejate, no quiero que te acerques. -Expresó, su mirada hervía y tenia los dientes apretados-. Si estar conmigo es peligroso, entonces no quiero tenerte nunca más, Harry.
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They just still in love » Larry Stylinson - 2da parte
ФанфикNO LEER SI NO LEÍSTE THEY JUST FELL IN LOVE. ❝Hemos sido creados para amar y ser destruidos.❞ Larry Stylinson AU. Advertencia: contenido homosexual, SMUT, lenguaje no florido y violencia. Si sos homofóbico/a o no shippeas Larry, ¿qué haces acá? No...