DECIR TE AMO

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POV JEONGMIN

Hyunseong me abrazó durante toda la noche sentirlo tan cerca de mí, oír los latidos de su corazón, sentir su calor, me daba una tranquilidad única, aquella tarde Hyunnie me sorprendió atacándome durante el picnic que él había organizado, por alguna razón cuando él comenzó a tocarme empecé a sentirme nervioso, actuaba torpemente dejándome llevar por las caricias que él me hacía.

Me sentía como un objeto de cristal entre sus brazos, nadie nunca me había tocado de la forma que él lo hizo, como si fuera a destrozarme en sus manos, me tocaba con tanta delicadeza que empecé a creer que no era real, que no estaba pasando, fué como un sueño pero lo viví con tanta intensidad, Hyunseong estaba despertando en mí aquel lado que había olvidado, la ternura, el cariño, el amor, la felicidad, todos aquellos sentimientos hermosos, los tenía nuevamente gracias a él.

A la mañana siguiente lo ayudé a levantar la tienda para poder ir de regreso a la cabaña, estaba algo nervioso, la idea de una casa sola para los dos me sonaba peligrosa en el estado en el que estaba, no quería hacer nada equivocado pero quería más, quería sentir a Hyunseong más cerca de mí, empecé a planear como una chica loca que quiere retener a toda costa a su novio, quería atraparlo.

- Rayos maldito sensual Hyunseong - murmuré

- ¿Qué? ¿Que soy qué? -  me oyó intantáneamente

- N-nada Hyunnie sigue caminando por favor

- Mira Jeong ya estamos cerca a la cabaña, llegamos más pronto de lo que creía

- Sip

- ¿Te pasa algo?

- Nop

- Pareces nervioso, ¿acaso estas avergonzado?

Tomó mis mejillas y las apretó, odiaba eso pero a él no podía decirle nada, y más aun en esas circunstancias.

- Me vengaré!!

Le grité y él escapó como un chiquillo sonriendo tontamente, Hyunseong podía ser extremadamente tierno cuando se lo proponía, corrí tras él pero inesperadamente se detuvo volteando hacia mí, caí sobre él sintiendo sus increíbles músculos pectorales en mis manos, algo se encendió en mi interior, era ridículo como un simple toque me hacía sentir así, debía concentrarme en otra cosa, miré alrededor algo confundido – Una araña!!!!! Me levanté espantado y seguí mi camino.

Llegamos a la cabaña, Hyunseong se puso a preparar el almuerzo, traté de ayudarlo un poco pero siempre fui tan inútil en esas cosas, terminé cortándome un dedo, Hyunseong asustado por la cantidad de sangre que salía se metió mi dedo en la boca succionando, para que la hemorragia parara, se veía tan sensual, enfadado por mis reacciones, salí de la cocina a respirar aire fresco.

Me molestaba el hecho de que a cada momento me imaginaba a Hyunseong de otra forma, es decir él hacía las cosas de forma tan inocente y yo pervertía todos sus actos, me sentía como un pervertido sexual que intentaba seducir a su víctima más inocente.

Finalmente la comida estaba hecha, Hyunnie había preparado como postre fresas con crema batida, ¿enserio? Traté de centrar mi mente en que sólo eran fresas nada fuera de lo común, eso de lo afrodisiaco lo habían inventado en las películas, pensaba mientras observaba a Hyunseong levantar una fresa y untarla con crema, lentamente la acercó a sus labios manchando primero la comisura de los mismos para luego darle un pequeño mordisco, lamiendo el resto de crema que quedaba en la frutilla, luego se entre lamió los labios finalizando con una mordida a sus labios inferiores, todo eso en cámara lenta.

Otra vez los pensamientos impuros, sentía que Hyunseong me provocaba, miré las malditas frutillas que parecían sonreír, tomé una furioso le puse crema y me la metí de un solo bocado, sabia delicioso, Hyunseong se acercó a mi mirándome dulcemente y con un beso quitó la crema que se había desbordado por mis labios.

Please Don't Leave MeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora