Sinopsis.

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Era una noche muy fria y él se agachó junto con Lynn que lloraba sin control, su corazón estaba tan destruido como lo estaba su casa y su peluche Crystal, ya no tenia a que aferrarse a la vida, exepto a sus propios brazos en los que estaba acurrucada tratando de no sentir frio a las afueras de su hogar, alli en el porche de madera vieja y un poco quemada.

-Dulzura. -con el dedo indice de su mano, acarició la mejilla suabe y con lagrimas de la pequeña.

Lynn se exaltó un poco en su lugar, y lo miró con ojos grandes llenos de terror y de desolación.
Se corrió un poco para atras algo asustada, ya no queria más sufrimientos.

-No te haré daño dulsura, quiero protegerte. -habló con calma tratando de mantener el mismo estado de Lynn.

-¡No te creo! -chilló la pequeña volviendo a llorar con tanta fuerza que parecia que su garganta se iba a destruir. -¡Mi casa se destruyó! -apuntó hacia atrás.

Él, con calma se acercó un poco más a Lynn y le tomó el rostro con sus dos manos muy delicadamente, haciendo que lo mirara.

-Yo sere tu protector, lo prometo.

-¿Como vas a ser mi protector si no eres mi papá? -sollozó debilmente.
Corrió su rostro de las manos de él y acunó su cara entre las suyas mientras daba pequeñas sacudidas.

-Déjame tomar tu mano dulsura. -le pidió extendiendola hacia ella, transmitiendole confianza a la destruida Lynn.

Ella vaciló unos segundos secándose las lagrimas, y luego le dió su pequeña mano al joven, su corazón latia tan rapido que no podía escuchar bien, tenia miedo pero debía confiar.

En unos segundos el joven cerró los ojos, y comenzó a ver millones de imagenes, eran como flashes de luz potente y pasaban con mucha nitidez, cada uno de los recuerdos malos de Lynn fueron apareciendo en escala, uno por uno, sin dejar de lado alguno.
Los sentía tan potentes, que tenia la sensacion de que estaba alli mismo, en cada ocasión.

Lynn por mientras lo miraba con ojos expectantes, se comenzó a preguntar si era de fiar, o si tenía que sacar la mano de la suya y correr hacia el bosque.

Luego vino la ultima imagen, la más larga y la más horrible de todas, la más desastrosa y desconsoladora. Un nudo se formó en la garganta de el joven, sintió unas ganas terribles de ponerse a llorar.

Una luz blanca y brillante cubrió a Lynn de pies a cabeza mientras una oscura y tenebrosa cubrio al chico.

Él abrió los ojos, y la miró, la miró con tanta intensidad que Lynn no resistió y lo abrazó, undio su cabeza entre el hueco de su cuello, y lo rodeó con sus brazos mientras derramaba algunas lagrimas.

De un momento a otro, Lynn se sentía protegida, como si el fuese su escudo protector contra todo lo oscuro de su vida entre los brazos fuertes de el joven.

Pero derrepente la mente de Lynn empezó a crear imagenes borrosas que luego desaparecían dejando un hueco inexplicable. Se sintió extraña y raramente en paz.

Se alejó de el joven lentamente y giró su cabeza hacia atras totalmente desorientada, viendo una casa horrible, destrozada y con pedazos faltantes, arrugó su frente y sin esperar un segundo más, preguntó con inocencia: -¿De quien es esta casa?

El chico sonrió, y dijo: -No te preocupes por eso, estas a salvo conmigo ahora.

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N.A:

No soy una experta, solo escribo por que me encanta hacerlo, besos :*

Voten y comenten, necesito saber si les gustó o no, bye bye.


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⏰ Última actualización: Mar 31, 2016 ⏰

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