No es cierto

Nota del autor: Al ser un OneShot es un relato pequeño  y POR LO TANTO NO TIENE CONTINUACIÓN

Atte: Lizmont913

Un joven de 27 años se encontraba recargado en la baranda de un barco, un barco que lo regresaba de Europa hacia Estados Unidos, un barco que para él tenía mucho valor sentimental, ese era el barco donde la había conocido cuando tenían 15 o 16 años, se encontraba en la misma posición, no le había ido del todo bien en la vida, había perdido a la mujer que más amaba para casarse con otra por la simple gratitud de haberle salvado la vida, el teatro lo había dejado, todo lo iba mal

En aquel barco también regresaba una joven preciosa de 25 años que también iba de regreso hacia Estados Unidos, un barco que le traía muchos recuerdos, un barco en el que confundió al que fuera su primer amor y ese chico de 16 años se convirtiera en el amor de su vida, ya no respondía al apellido Andrew, pero seguía con el apoyo de su fiel amigo Albert, estaba en su camarote con el señor George

-Voy a caminar un poco George- se puso de pie la rubia

-Muy bien señorita Candy, ¿gusta que la acompañe?- dijo el mayordomo

-No gracias, lo veo en la cena- dijo Candy y salió del camarote

Mientras caminaba iba viendo cada detalle del barco, un barco que le traía muchos recuerdos y sus pensamientos la llevaron hasta un punto en específico

-Hace 10 años que te conocí aquí mi amor- pensó en voz alta Candy, cuando entre la bruma una figura se comenzó a divisar, se acercó lentamente y vio quien era

-Terry- susurro ella pensando que era una alucinación, pero aquella alucinación era más bien una realidad y escucho claramente esa voz que lo había conquistado

-Candy- dijo él y volteo lentamente pensando que era una mala jugada de su mente, se giró lentamente y la vio hay de pie, más madura, menos niña, más mujer

-Hola Candy- dijo él sorprendido al verla ahí

-Hola Terry- dijo ella al igual que el sorprendida

-¿Cómo estás? Hace tiempo que no se de ti, me han dicho que has estado bien, y sé que siempre ha sido así – dijo Terry nervioso

-Yo estoy bien, muy bien gracias por preguntar, me ha ido cada vez mejor y todo comienza a caminar- dijo ella un poco nerviosa

¿A quién engaño?

¿Qué estoy haciendo?

¡Cómo te extraño!

Me estoy mintiendo

Eran pensamientos que tenían la chica de los ojos verdes y el chico de los ojos azules

-¿Y tú cómo estás?- le pregunto a ella mientras se cruzaba de brazos

-Yo estoy mal, muy mal gracias por preguntar, se siente cada vez peor, nada parece caminar- dijo Terry desganado

-¿A qué te refieres?- dijo ella preocupada

-A mi matrimonio con Susana, tenemos problemas, como los tiene cualquier matrimonio- dijo él alzando los hombros

-¿Y tú Tarzán pecoso, eres feliz?- dijo él con ternura al decirle de nuevo así

-Claro que sí mocoso engreído, soy muy feliz- dijo ella con una gran sonrisa

-Qué bueno Candy, bueno, me dio gusto saludarte- dijo él y se dio la vuelta para irse

-¡Terry!- gritó ella

-¿Qué sucede?- dijo él sorprendido

-¿Tu eres feliz?- pregunto ella un poco nerviosa

-Claro Tarzán pecoso entrometido, soy muy feliz- dijo con una sonrisa de medio lado y la expresión de Candy se desdibujo por completo -¿Estas bien?- dijo preocupado

-¿Por qué te engaño? ¿Qué estoy haciendo? ¡Cómo te extraño! Me estoy mintiendo – Dijo Candy dejando abierto su corazón

-Candy, yo también te engañe, Susana y yo, no duró más que unos meses, no tengo un trabajo estable, volví a hacer papeles pequeños en el teatro y no he podido encontrar una relación estable- dijo su verdad

-Eso no puede ser cierto- dijo ella moviendo la cabeza de un lado a otro

-Tienes razón No es cierto, si ya no puedo con este desierto, si se quedó mi corazón abierto, yo no te he olvidado amor- Dijo Terry y le puso las manos en los hombros a su rubia

-Lo siento, yo ya no entiendo para que te miento, si estoy hundida en este sentimiento, aun no es tarde por favor, yo no te he olvidado amor- le dijo ella viéndolo a esos hermosos zafiros deslumbrantes que tenía por ojos

-Candy, a mí ya no me sale el sol- dijo él viéndola a los ojos

-Lo sé, desde que tu amor se escapó me siento exactamente igual y sentía como sus ojos comenzaban a cristalizarse

-Me cuesta saber quién soy yo Candy- dijo y la abrazo

Aun no es tarde por favor, yo no te he olvidado amor- Se dijeron mutuamente, para después fundirse en un tierno y dulce beso, un beso por el que habían esperado 7 años de su vida

-Candy, te amo- le dijo él cuando se separaron

-Y yo a ti, jamás lo he dejado de hacer- dijo ella con lágrimas en los ojos

-¿Quieres intentarlo de nuevo?- dijo él mientras limpiaba sus lágrimas

-Claro que sí, contigo iría hasta el fin de los tiempos- dijo ella con una sonrisa llena de esperanza, para después volverse a besar, y ahora un beso salvaje, lleno de pasión, un beso propio de los dos rebeldes del colegio San Pablo

Y ahí, justo en el punto donde se habían conocido 10 años antes, hoy estaban jurándose amor, y dándose una nueva oportunidad de amar y ser amados, sin nada ni nadie que se los impidiera